Los zorzales, como el zorzal malvís, se alimentan de gusanos de tierra, limacos y caracoles.
Tragan fácilmente los limacos, aunque, cuando se trata de caracoles, debe primeramente librarse del caparazón.
Para conseguirlo, el zorzal busca una piedra sobre la que pueda romper el caparazón de los caracoles que ha reunido. Junto a esta especie de «yunque» no es‘ difícil encontrar una docena de caparazones.