Se dice normalmente que las chicas hablan y los chicos actúan.
Pero eso no quiere decir que las emociones con los sentimientos no sean exactamente los mismos en los dos sexos.
Sencillamente, la manera de expresarlos es diferente, lo que puede dar lugar a situaciones y de incomprensión.
Durante la adolescencia, principalmente, los chicos tienden a ser más «machitos», y hablar de sus sentimientos puede parecerles verse débiles.
Pero, sin lugar a duda, interiormente le dan vueltas a las mismas cosas que las chicas.
Es triste que en el colegio y el instituto se ridiculice en ocasiones al chico sensible, al joven que deja ver sus sentimientos con más facilidad cuando, en realidad, todos tenemos unos sentimientos parecidos.