Saltar al contenido
Deberes escolares » Charlas educativas » Amos Winter: La silla de ruedas todo terreno de bajo costo. – Charla TEDxBoston 2012

Amos Winter: La silla de ruedas todo terreno de bajo costo. – Charla TEDxBoston 2012

Charla «Amos Winter: La silla de ruedas todo terreno de bajo costo.» de TEDxBoston 2012 en español.

¿Como construir una silla de ruedas todo terreno por menos de 200 dolares?
El ingeniero Amos Winter del Instituto Tecnológico de Massachussets nos guía a través de la mecánica de una silla de ruedas todo terreno que es barata y fácil de construir –para conseguir una verdadera accesibilidad– y nos comparte lo que aprendió con este proyecto.

  • Autor/a de la charla: Amos Winter
  • Fecha de grabación: 2012-06-22
  • Fecha de publicación: 2012-11-20
  • Duración de «Amos Winter: La silla de ruedas todo terreno de bajo costo.»: 674 segundos

 

Traducción de «Amos Winter: La silla de ruedas todo terreno de bajo costo.» en español.

Vivir con una discapacidad física no es fácil en ningún lugar del mundo, pero si vives en un país como Estados Unidos, tienes a tus disposición equipamiento que hace tu vida mas fácil.

Si estas en un edificio puedes usar el ascensor, si vas a cruzar la calle, dispones de rebajes en las aceras, y si tienes que viajar algo más lejos de lo que podrías hacerlo por tus propios medios, existen vehículos accesibles.

Si no puedes permitirtelos, existe el trasporte público accesible.

Pero en el mundo en vías de desarrollo, es bastante diferente 40 millones de personas no tienen acceso a una silla de ruedas y de ellas la mayoría vive en zonas rurales, donde la única forma de conectar con la comunidad, la educación y el empleo es desplazándose largas distancias en terreno escabroso a menudo por sus propios medios.

La equipación que estas personas tienen a su disposicion no ha sido creada para estas situaciones y se rompe facilmente, siendo difícil de reparar.

Comencé a observar las sillas de ruedas en países en desarrollo en el año 2005 cuando pasé el verano evaluando el estado de la tecnología en Tanzania, tuve la ocasión de hablar con grupos de discapacitados, usuarios y fabricantes de sillas de ruedas, Lo que más llamó mi atención fue que no existía ningún dispositivo específicamente diseñado para zonas rurales, que fuera rápido y eficiente en los distintos tipos de terreno.

Como ingeniero mecánico, del Instituto Tecnologico de Massachussets, con todos los recursos a mi alcance pensé que debería intentar hacer algo al respecto.

Cuando piensas en intentar viajar grandes distancias en terreno escabroso lo primero que me vino a la cabeza fue una bicicleta de montaña y efectivamente la bicicleta de montaña cumple esta funcion porque tiene marchas y puedes pasar a una marcha corta si tienes que subir una colina o atravesar barro o arena obteniendo gran fuerza pero a baja velocidad.

Si por el contrario, quieres ir mas rápido, por ejemplo, sobre asfalto, puedes cambiar a una marcha alta, donde tendrás menos potencia, pero más velocidad.

La evolución lógica era por tanto hacer una silla de ruedas con los componentes de una bicicleta de montaña lo que mucha gente había hecho ya.

Había un par de estos productos en EE.UU, pero su introducción a los países en vías de desarrollo sería complejo, sobre todo por su alto coste.

Estoy hablando de un medio en el cual necesitas un producto por menos de 200 dolares; y que además fuera capaz de desplazarse 5 kilómetros al día, para poder ir al trabajo o a clase y hacerlo sobre diferentes tipos de terreno.

Pero cuando llegas a casa o quieres estar en el interior en el trabajo tiene que ser lo suficientemente pequeño y manejable para permitir su uso en interiores.

Más aún, para que tenga una larga vida útil en zonas rurales, ha de poderse reparar utilizando las herramientas, materiales y conocimientos disponibles en esas zonas.

El problema crucial al que nos enfrentamos es ¿cómo crear una herramienta simple que nos aporte una gran ventaja mecánica? ¿Como construir una bicicleta de montaña para los brazos que no tenga su coste ni complejidad? Como sucede con las soluciones simples, a menudo la respuesta es evidente y para nosotros fue la palanca.

Usamos palancas continuamente, en herramientas, pomos, y piezas de bicicleta.

El momento de inspiración, el momento clave de la creación fue sentado frente a mi cuaderno de diseño cuando comencé a pensar sobre alguien sujetando una palanca.

Si se sostiene cerca del final de la misma se obtiene una palanca de gran longitud que produce un gran torque según se impulsa de un lado a otro, obteniendo una marcha corta.

A medida que se desliza la mano hacia abajo, se impulsa con una longitud de palanca eficaz más pequeña, pero a través de un angulo mayor, cada impulso crea una mayor velocidad de rotación y proporciona una marcha más larga.

Lo emocionante de este sistema radica en que es mecánicamente muy simple y puedes hacerlo utilizando tecnologia mundialmente utilizada desde hace cientos de años.

Poniendo esto en practica, esta es la silla de ruedas «LFC» que después de algunos años de desarrollo, está ahora en producción.

Aqui tienen a un usuario de silla de ruedas, quien sufre de parálisis, en Guatemala, Pueden ver que puede desplazarse por un terreno escabroso.

La clave, de nuevo, es que cuando él quiere ir deprisa, sujeta las palancas cerca del eje y utiliza más angulo con cada movimiento y cuando el movimiento se hace mas complicado, solo tiene que deslizar la manos hacia arriba creando un mayor par de fuerza, y disminuyendo la fuerza necesaria para conseguir atravesar el terreno mas difícil.

Lo más importante aquí es que la persona es la maquinaria compleja en este sistema.

Es la persona la que sube y baja las manos en las palancas por lo que el propio mecanismo es muy simple y puede realizarse con piezas de bicicleta accesibles en cualquier lugar del mundo.

Debido a que esas piezas están ampliamente disponibles, son super baratas.

Son producidas en ingentes cantidades en China e India y tenemos acceso a ellas en cualquier lugar del mundo, por lo que podemos construir y reparar la silla en cualquier lugar incluso en un pequeño pueblo con el mecánico local, ya que tiene las herramientas, el conocimiento y las piezas disponibles.

Cuando se quiere utilizar la silla LFC en interiores, todo lo que hay que hacer es quitar las palancas del tren motriz, guardarlas en los laterales, y se convierte en una silla de ruedas normal que puedes utilizar como cualquier otra, ya que el tamaño es el mismo.

Es lo suficientemente estrecha como para atravesar una puerta de tamaño normal, es lo suficientemente baja para encajar debajo de una mesa y es pequeña para que resulte manejable en el baño para que el usuario pueda acercarse al inodoro y sea capaz de sentarse en el como haría con una silla de ruedas convencional.

Hay tres puntos en los que me gustaría hacer incapie ya que creo que son la base de este proyecto.

El primero es que el producto es viable porque hemos sido capaces de combinar eficazmente rigurosa ingeniería y análisis con un diseño centrado en el usuario teniendo en cuenta los factores sociales y económicos, tan importantes para los usuarios de sillas de ruedas en los países en vías de desarrollo.

Como académico en el Instituto Tecnologico de Massachussets e ingeniero mecanico puedo hacer cosas como ver en qué tipo de terreno por el que hay que desplazarse, averiguar cuanta resistencia ofrecerá, ver que piezas hay disponibles, mezclarlas y juntarlas para averiguar que tipo de tren de engranaje se puede utilizar, y después ver la potencia y la fuerza que se puede obtener del tren superior de nuestro cuerpo, para analizar a qué velocidad podremos desplazarnos en esta silla moviendo las manos a lo largo de las palancas.

A si que, como un estudiante entusiasmado nuestro equipo creó un prototipo que llevamos a Tanzania, Kenia y Vietnam en el 2008, para descubrir que era pésimo; porque no tuvimos suficiente información de los usuarios.

Así que lo probamos con usuarios de sillas de ruedas, con fabricantes que nos dieron su opinión, no solo expresando sus problemas, sino también exponiendo sus soluciones y trabajando conjuntamente volvimos a la mesa de diseño y creamos un nuevo modelo con el que volvimos a África del este en 2009.

Resultó funcionar mucho mejor en terreno escabroso que una silla de ruedas convencional aunque todavía no funcionaba bien en interiores ya que era demasiado grande y pesado, difícil de maniobrar.

De nuevo, con la opinión de los usuarios, volvimos a la mesa de trabajo y conseguimos un mejor diseño, 9 kilos más ligero, y tan estrecho como una silla de ruedas convencional.

Lo probamos en Guatemala y la mejora fue tal que nos llevo , donde estamos ahora, a su producción.

Además de ser ingenieros hemos sido capaces de cuantificar los beneficios de rendimiento de nuestra silla LFC.

Aquí tienen algunos datos de nuestras pruebas en Guatemala, doinde probamos nuestra LFC en el terreno del pueblo, y recogimos los resultados biomecánicos de los usuarios, su consumo de oxigeno, lo rápido que se desplazan, y cuanta energía emplean en ello, tanto con nuestra silla LFC como con una convencional, y descubrimos que nuestra silla es un 80% más rapida en estos terrenos que una silla tradicional.

También es un 40% más eficiente y debido a la ventaja mecánica que se obtiene de las palancas produce un 50% de incremento en el par motor y supone una ayuda real en terreno escabroso.

La segunda lección que hemos aprendido es que las limitaciones en el diseño realmente impulsan la innovación.

Debido a que teníamos que alcanzar un coste realmente bajo, conseguir que la silla pudiera ser útil en diferentes tipos de terreno a la vez que en interiores y ser lo suficientemente simple para repararla acabamos consiguiendo un producto en esencia nuevo, una innovación en un sector que no ha cambiado en cientos de años.

Las ventajas que supone no son sólo aplicables a los países en vías de desarrollo.

¿Por que no también en países como E.E.

U.U.? Para ello nos asociamos con Continuum, una empresa de diseño local en Boston para realizar la versión de gama alta apropiada para los países desarrollados, cuyo mercado seria principalmente Estado Unidos y Europa enfocado a compradores de ingresos altos.

El último punto que me gustaría resaltar es mi convicción de que este proyecto ha resultado exitoso porque hemos involucrado a todos los inversionistas que han creído en él; que han sido valiosos para desarrollar la tecnología desde la creación de una idea a través de la innovación, validación, comercialización y difusión sabiendo que ese ciclo comienza y termina en los usuarios.

Ellos son quienes definen los requisitos tecnológicos y quienes tienen que darnos finalmente el visto bueno diciendo: «Si, efectivamente funciona.

Cubre nuestras necesidades».

Así, personas como yo en el ámbito académico podemos innovar, analizar y probar, procesar datos y realizar prototipos a nivel experimental.

¿Pero como conseguimos comercializar esos prototipos? Para ello necesitamos expertos en comercialización, como Continuum, lo que nos llevo a crear una ONG para llevar nuestra silla al mercado «Investigación Global de Innovación Tecnológica» y también a asociarnos con un gran fabricante en la India, Industrias Pinnacle, esto nos ha dado capacidad para producir 500 sillas al mes.

El primer lote de 200 estará disponible el próximo mes para su envío a la India.

Finalmente para acercarnos a la gente a gran escala, nos asociamos con la mayor organización de discapacidad del mundo, «Jaipur Foot».

Lo más valioso de este modelo es el poder juntar a todas la partes interesadas que representan a todos los eslabones de la cadena desde la concepción de la idea hasta la implementación en el campo.

Ahí es donde sucede la magia.

Ahí es donde una persona como yo, un academico puede analizar, probar y crear nueva tecnología y determinar cuantitativamente su rendimiento.

Puedes conectar con inversionistas, como los fabricantes, hablar directamente con ellos y hacer uso de su conocimiento en las practicas de fabricación locales y sus clientes; y combinar esas aportaciones con nuestro conocimiento de ingenieria, para crear conjuntamente algo mejor que lo que cualquiera de nosotros podría haber hecho por separado.

Así puedes Involucrar también al usuario final en el proceso de diseño, no solo preguntando por sus necesidades, sino preguntándole cómo piensa que pueden conseguirse.

Esta es una foto de nuestra ultima prueba de campo en la India, donde tuvimos una tasa de adopción del 90%, que prefirieron el uso de nuestra silla sobre el de una convencional, y esta foto en concreto es de Ashok, que sufre una lesión espinal por una caída de un árbol.

Él es sastre, pero desde que sufrió el accidente no ha sido capaz de realizar el trayecto de un kilómetro desde su casa a su tienda en silla de ruedas porque el camino es muy escabroso.

Pero el día después de tener nuestra silla, pudo desplazarse ese kilómetro y abrir su tienda, poco después consiguió un contrato para hacer los uniformes del colegio y comenzó a ganar dinero, y pudo mantener a su familia de nuevo.

Ashok: «Tu también me animaste a trabajar.

Descansé un día en casa y al día siguiente volví a mi tienda.

Ahora todo ha vuelto a la normalidad.» Amos Winter: Muchas gracias por invitarme hoy.

https://www.ted.com/talks/amos_winter_the_cheap_all_terrain_wheelchair/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *