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Charla «Cómo crear un mundo de ficción – Kate Messner» de TED-Ed en español.
Vea toda la lección en: http://ed.ted.com/lessons/how-to-build-a-fictional-world-kate-messner
¿Por qué la trilogía del Señor de los Anillos de J.R.R. Tolkien es tan fascinante?¿Y qué hay del Matrix o Harry Potter? Lo que hace que estos mundos disparatados cobren vida es la existencia de leyes claras y consistentes de cómo la gente, las sociedades, e incluso las leyes de la física, funcionan en estos universos de ficción. La autora Kate Messner nos enseña un par de trucos para que también puedas crear un mundo que valga la pena explorar con tus propias palabras.
Lección de Kate Messner, animación de Avi Ofer.
- Autor/a de la charla: Kate Messner
- Fecha de grabación: 2014-01-09
- Fecha de publicación: 2019-02-15
- Duración de «Cómo crear un mundo de ficción – Kate Messner»: 303 segundos
Traducción de «Cómo crear un mundo de ficción – Kate Messner» en español.
En el mundo de J.R.R., Gandalf es uno de los 5 brujos enviado por Valar para guiar a los habitantes de la Tierra Media en sus batallas contra las fuerzas del mal de Sauron.
El cuerpo de Gandalf era mortal, sujeto a las leyes físicas de la Tierra Media, pero su espíritu era inmortal, como se ve cuando muere como Gandalf el Gris y resucita como Gandalf el Blanco.
Según el guión de Wachowski, un humano libre solo tiene que conectarse y violar el código binario neón de Matrix para aprender a volar un helicóptero en apenas unos segundos.
Y si eres el Elegido, o uno de los Elegidos, ni siquiera necesitas un helicóptero, solo un par de gafas geniales.
Los gatos Cheshire pueden hacer malabarismos con sus cabezas.
Los iPads son rudimentarios.
Ningún juego de Qidditch se termina hasta que la Snitch dorada es atrapada.
Y la respuesta a la pregunta más importante de la vida, del universo, y a todo, ciertamente es 42.
Así como en la vida real los personajes de ficción operan de forma consistente dentro de un espectro de leyes físicas y sociales.
Es lo que hace que estos mundos complejos sean creíbles, comprensibles, y que valgan la pena explorar.
En la vida real, la Ley de la Gravedad mantiene los siete libros de la serie de «Harry Potter» en su sitio en millones de estantes alrededor del mundo.
Sabemos que esto es verdad, pero también sabemos que desde que J.K.
escribió las palabras brujo, varita mágica, y «Wingardium Leviosa», esa Ley de la Gravedad dejó de existir.
en los billones de páginas que descansan en esos sujetalibros.
Los autores de obras de ciencia ficción y fantasía crean, literalmente, mundos.
Crean las leyes, los mapas, los linajes, las lenguas, las culturas, los universos, los universos alternativos dentro de los universos, y de esos mundos surgen historias, historias y más historias.
Cuando están bien creados, los lectores pueden comprender los mundos de ficción y sus leyes, así como los personajes que viven en ellos, y a veces, tan bien, o incluso mejor, que lo que el lector puede comprender el mundo externo fuera del libro.
Pero, ¿cómo? ¿Como los garabatos humanos plasmados en una página pueden entrar por nuestros ojos y mandarle señales a nuestros cerebros de modo que decodificamos lógica y emocionalmente como narraciones complejas que nos transportan a luchar, llorar, cantar, y pensar, que son tan fuertes que no solo sostienen un mundo inventado completamente por el autor, sino que también pueden cambiar la perspectiva del lector del mundo real, y que solo regresa cuando llegamos a la última página? No estoy segura si alguien tiene la respuesta a esta pregunta, mas aún, todos los días se crean mundo ficticios en nuestras mentes, en las computadoras, hasta en las servilletas del restaurante de la calle de abajo.
La verdad es que la imaginación y un deseo, figurativamente, de vivir en tu propio mundo es todo lo que necesitas para comenzar a escribir una novela.
No soñé Hogwarts o la cantina en la Guerra de las Galaxias, pero he escrito algunas novelas de misterio científico para niños y adolescentes.
He aquí algunas preguntas y métodos que he usado para ayudarme a crear los mundos en donde se desarrollan la trama de esos libros.
Comienzo con un lugar básico y una época.
Ya sea un mundo de fantasía o en un contexto futurista del mundo real, es importante saber dónde estás y si estás trabajando en el pasado, el presente, o el futuro.
Me gusta crear una línea del tiempo que muestre cómo el mundo llegó a formarse.
¿Qué eventos del pasado ayudaron a darle la forma que tiene hoy? Luego uso una lluvia de ideas para responder a estas preguntas que generan los detalles de mi mundo ficticio.
¿Qué leyes existen en este lugar? Lo cubre todo, desde las leyes de la gravitación (o su inexistencia) hasta las leyes de la sociedad, y el castigo para aquéllos que violan estas leyes.
¿Qué tipo de gobierno existe en este mundo? ¿Quién tiene poder y quién no? ¿En qué cree la gente? Y, ¿qué es lo que esta sociedad valora más? Luego hay que pensar sobre la vida cotidiana.
¿Cómo es el clima en este mundo? ¿Dónde viven sus habitantes, o trabajan, o van a la escuela? ¿Qué comen y cómo juegan? ¿Cómo trata a sus niños y ancianos? ¿Cómo se relacionan con las plantas y los animales del mundo? Y, ¿cómo son las plantas y los animales? ¿Qué tipo de tecnología existe? ¿Medios de transporte? ¿Tipos de comunicación? ¿Acceso a la información? ¡Hay tantas cosas en las que pensar! Así que pasa un tiempo pensando en estas cosas y la respuestas a esas preguntas, y andarás por buen camino en la creación de tu propio mundo de ficción.
Una vez que conoces tu mundo así como esperas que tus lectores también, deja que tus personajes ronden libremente y mira a ver qué pasa.
Y pregúntate: «¿Cómo este mundo que creastes le da forma a los individuos que habitan en él? ¿Y qué tipo de conflictos puede surgir?» Responde a estas preguntas y allí tienes tu historia.
¡Buena suerte, creador de mundos futuros!
https://www.ted.com/talks/kate_messner_how_to_build_a_fictional_world/