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Cómo ir al espacio, sin tener que ir al espacio – Charla TEDGlobal 2014

Charla «Cómo ir al espacio, sin tener que ir al espacio» de TEDGlobal 2014 en español.

«Empezaremos a habitar el espacio exterior», dice el comandante de la tripulación de la NASA Angelo Vermeulen. «Podríamos demorar 50 años o 500 años, pero va a suceder». En esta charla encantadora, este Becario Senior de TED describe algunos de sus trabajos en los que se asegura de que los humanos estemos preparados para la vida en el espacio profundo… y comparte un proyecto artístico fascinante en el que invitó a gente de todo el mundo a diseñar casas en las que podríamos vivir.

  • Autor/a de la charla: Angelo Vermeulen
  • Fecha de grabación: 2014-10-06
  • Fecha de publicación: 2015-02-19
  • Duración de «Cómo ir al espacio, sin tener que ir al espacio»: 424 segundos

 

Traducción de «Cómo ir al espacio, sin tener que ir al espacio» en español.

Soy polifacético.

Como científico, fui comandante de la tripulación de la NASA para una simulación a Marte el año pasado y como artista desarrollo en todo el mundo prácticas artísticas multiculturales.

Últimamente, he estado haciendo un poco de las dos.

Pero antes, hablaré un poco más sobre esa misión de la NASA.

Este es el programa HI-SEAS, un proyecto patrocinado por la NASA para simular superficies planetarias en el volcán Mauna Loa en Hawái, y es un programa de investigación diseñado específicamente para estudiar los efectos del aislamiento a largo plazo en pequeñas tripulaciones.

Viví en esta cúpula durante 4 meses junto a una tripulación de 6 personas, y fue, por supuesto, una experiencia muy interesante.

Hicimos todo tipo de investigaciones.

De hecho, nuestra principal investigación se centraba en el estudio de los alimentos pero, aparte de eso, de desarrollar un nuevo sistema alimentario para los astronautas que viven en el espacio profundo, también hicimos todo tipo de otras investigaciones.

Hicimos actividades fuera del vehículo, como se puede ver aquí, vistiendo prototipos de trajes espaciales pero también hicimos muchas otras cosas, como rellenar cuestionarios al final de cada día.

Mucho, mucho trabajo.

Ahora, como pueden imaginar, es todo un reto vivir con solo un puñado de personas en un espacio pequeño mucho tiempo.

Hay todo tipo de desafíos psicológicos: cómo mantener un equipo unido en estas circunstancias, cómo hacer frente a la distorsión temporal que uno empieza a sentir viviendo en estas circunstancias; los problemas de sueño que se plantean; etc.

Pero también aprendimos mucho.

Aprendí mucho acerca de cómo cada miembro de la tripulación se enfrenta realmente a una situación similar; cómo se puede mantener un equipo productivo y feliz, por ejemplo, dándoles bastante autonomía es un buen truco para lograrlo; y, sinceramente, aprendí mucho sobre el liderazgo, porque yo era el comandante de la tripulación.

Así que al hacer esta misión, empecé a pensar más a fondo en nuestro futuro en el espacio exterior.

Nos aventuraremos en el espacio exterior y empezaremos a habitarlo.

No tengo duda al respecto.

El proceso puede demorar 50 años o 500 años, pero, no obstante va a suceder.

Se me ocurrió un nuevo proyecto artístico llamado Buscador [Seeker].

Es en realidad un reto para todas las comunidades mundiales de presentar prototipos de naves espaciales que repiensan la supervivencia y las posibilidades de habitar humanas.

Ese es el núcleo del proyecto.

Ahora, una cosa importante: esto no es un proyecto distópico.

No se trata de: «¡Dios mío, el mundo se acaba! Tenemos que escapar porque hay que construir otro futuro en otro lugar».

No, no.

El proyecto básicamente invita a la gente dar un paso más allá de nuestras limitaciones terrestres y, así, reimaginar nuestro futuro.

Es muy útil y funciona muy bien, y es realmente la parte más importante de lo que hacemos.

Ahora, en este proyecto, uso un enfoque cocreativo ligeramente diferente a lo que se suele esperar de muchos artistas.

Prácticamente lanzo una idea básica a un grupo, en una comunidad, y la gente empieza la ideación conjunta para darle forma y construir el proyecto.

Es como las termitas, la verdad.

Simplemente trabajamos juntos, e incluso cuando nos visitan los arquitectos, al ver lo que hacemos, a veces tienen dificultades para entender cómo construimos sin un plan maestro.

Siempre proponemos estas esculturas fantásticas a gran escala que en realidad también se pueden habitar.

A la primera versión la hizo, en Bélgica y Holanda, un equipo de casi 50 personas.

Esta es la segunda iteración de ese mismo proyecto, pero en Eslovenia, en un país diferente, el nuevo grupo quería promover una arquitectura diferente.

De hecho quitaron el planeamiento, manteniendo solo la base de la obra, e imaginaron un nuevo diseño, mucho más biomórfico encima de ella.

Y eso es otra parte fundamental del proyecto.

Es una obra de arquitectura cambiante, en curso.

Esta fue la última versión presentada hace solo unas semanas en Holanda, que usaba caravanas como módulos para construir una nave espacial.

Compramos algunas caravanas de segunda mano, las abrimos, y las hemos vuelto a montar en una nave espacial.

Ahora, cuando pensamos en naves espaciales, no las pensamos solo como un reto tecnológico.

En realidad las vemos como una combinación de 3 sistemas: ecológico, humano y tecnológico.

Siempre hay un componente fuerte ecológico integrado en el proyecto.

Aquí pueden ver los sistemas acuapónicos que realmente rodean a los astronautas, y que están constantemente en contacto con parte de los alimentos que comen.

Ahora, una cosa muy típica de este proyecto es que las misiones de aislamiento ocurren dentro de estos proyecto de arte.

En realidad nos encerramos durante varios días para probar lo que hemos construido.

Y esta es, por ejemplo, a la derecha pueden ver una misión de aislamiento en el Museo de Arte Moderno de Ljubljana en Eslovenia, donde se encerraron 6 artistas y diseñadores —yo también— durante 4 días en el interior del museo.

Y, por supuesto, es una gran experiencia y muy representativa para todos.

Ahora mismo, estamos desarrollando la siguiente versión del proyecto junto con Camilo Rodríguez-Beltrán, que también es un Becario TED, en el desierto de Atacama, en Chile, un lugar mágico.

En primer lugar, es realmente considerado un análogo de Marte.

Se parece a Marte en ciertos lugares y la NASA lo usa para probar equipos.

Tiene una larga historia por estar conectado con el espacio a través de las observaciones de estrellas.

Es el hogar de ALMA, el gran telescopio que se construye allí.

Pero también, es el lugar más árido del planeta, eso lo hace muy interesante para nuestro proyecto, porque, de repente, la sostenibilidad es algo que tenemos que explorar a fondo.

No tenemos otra opción, así que estoy a la expectativa de lo que suceda.

Un detalle específico en esta versión particular del proyecto: me interesa mucho ver cómo podemos conectar con la población local, la población nativa.

Esta gente ha vivido allí desde hace mucho tiempo y se les puede considerar expertos en sostenibilidad, por eso me interesa mucho ver qué podemos aprender de ellos, y cómo llevar conocimientos indígenas en la exploración espacial.

Así que estamos tratando de redefinir cómo vemos nuestro futuro en el espacio exterior explorando la integración, la biología, la tecnología y las personas, usando la cocreación y la exploración de las tradiciones locales para ver cómo podemos aprender del pasado e integrarlo en nuestro porvenir.

Gracias.

(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/angelo_vermeulen_how_to_go_to_space_without_having_to_go_to_space/

 

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