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Charla «David Bismark: el voto electrónico sin fraude» de TEDGlobal 2010 en español.
David Bismark muestra un nuevo sistema de votación que contiene un modo sencillo, verificable, para evitar el fraude y que se cuente mal, mientras se mantiene en secreto el voto de cada persona.
- Autor/a de la charla: David Bismark
- Fecha de grabación: 2010-07-14
- Fecha de publicación: 2010-11-02
- Duración de «David Bismark: el voto electrónico sin fraude»: 422 segundos
Traducción de «David Bismark: el voto electrónico sin fraude» en español.
Hay pocas cosas que nos unen tanto como unas elecciones.
Acudimos a las elecciones, votamos, las seguimos atentamente.
Nuestras democracias se basan en las elecciones.
Todos entendemos por qué tenemos elecciones, y todos salimos de casa el mismo día para ir a votar.
Apreciamos la oportunidad de dar nuestra opinión para ayudar a decidir el futuro del país.
La idea fundamental es que a los políticos se les concede el mandato para hablar por nosotros, para tomar decisiones en nuestro nombre que nos afectan a todos.
Sin ese mandato, serían corruptos.
Bueno, lamentablemente, el poder corrompe por eso la gente hace muchas cosas para llegar al poder y mantenerlo, incluso cosas malas en las elecciones.
Ya ven, aunque la idea de la elección es perfecta, una elección nacional es un proyecto grande, y los proyectos grandes son complicados.
Cada vez que hay una elección, parece que algo siempre sale mal, alguien trata de hacer trampa, o algo se tuerce por accidente — se pierde una urna por aquí, boletas controvertidas por allá.
Para asegurarnos que salga mal lo menos posible, tenemos todos estos procedimientos en torno a las elecciones.
Por ejemplo: llegamos a la mesa electoral, y el presidente de mesa nos pide la identificación antes de entregarnos el sobre y pedirnos que pasemos a la sala de votación para sufragar.
Cuando uno regresa coloca el voto en la urna donde se mezcla con todos los otros votos de modo que nadie más sepa nuestro voto.
Bueno, lo que quiero que pensemos un momento es lo que sucede después, después de colocar el voto en la urna.
La mayoría volverá a casa sintiéndose seguro de que su voto fue contado porque confía que el sistema electoral funciona.
Confía en que las autoridades de mesa y los fiscales hagan bien su trabajo.
Las urnas van a los lugares de escrutinio.
Se les quita el precinto, se extraen los votos, y se cuentan laboriosamente.
La mayoría tenemos que confiar en que nuestro voto sea contabilizado correctamente, y tenemos que confiar que lo mismo suceda con todos los votos de la elección.
Tenemos que confiar en mucha gente y en muchos procedimientos.
Y a veces tenemos que confiar en los ordenadores.
Imaginen cientos de millones de votantes emitiendo cientos de millones de votos, todos para ser contados correctamente y todo lo que puede salir mal generando todos esos titulares negativos.
Y no se podemos evitar sentirnos agobiados por la idea de tratar de mejorar las elecciones.
Bueno, de cara a todas estos titulares negativos los investigadores han recapacitado sobre cómo hacer las elecciones de manera diferente.
Han tomado distancias para tener una visión global.
Y la visión global es ésta: las elecciones deberían ser verificables.
Los votantes deberían poder verificar que sus votos fueron contados correctamente, sin violar el secreto electoral, que es tan importante.
Y esa es la parte difícil.
¿Cómo hacer un sistema electoral totalmente verificable y al mismo tiempo mantener los votos en absoluto secreto? Bien, la forma que hemos ideado utiliza ordenadores pero no depende de ellos.
Y el secreto es el formulario de votación.
Si los miran de cerca se darán cuenta de que la lista de candidatos está en un orden diferente en cada caso.
Y eso significa que, si uno marca sus opciones en una de ellas y luego elimina la lista de candidatos la parte que queda no revelará para quién fue el voto.
Y en cada formulario de votación existe este valor cifrado en forma de código de barras 2D a la derecha.
Se usa un poco de criptografía, y es complicada, pero lo que no es complicado es votar con uno de estos formularios.
Podemos dejar la criptografía a los ordenadores, y luego usar el papel como comprobante.
Así es como se vota.
Uno recibe un formulario de votación al azar, y luego entra en la sala de votación, marca sus preferencias, y corta por el troquelado.
Y destruye la lista de candidatos.
Y la parte que queda, la que tiene las marcas, es el voto encriptado.
La autoridad de la mesa escanea el voto encriptado.
Y como está encriptado puede ser enviado, almacenado, y contado de forma centralizada y mostrado en un sitio web para que todos lo vean, incluyendo Ud.
Así que uno se lleva el voto cifrado a casa como recibo.
Y tras el cierre de las elecciones, uno puede verificar que su voto fue contado comparando el recibo con el voto del sitio web.
Y recuerden que el voto está encriptado desde el momento en que abandonaron la sala de votación entonces, si una autoridad electoral quiere averiguar cómo votaron no podrá hacerlo.
Si el gobierno quiere descubrir cómo votaron no va a poder.
Ningún hacker puede descifrarlo y descubrir cómo votaron.
Ningún hacker puede descifrarlo y cambiar su voto porque entonces no coincidirá con el recibo.
Los votos no pueden perderse porque de ser así no los encontrarían cuando los buscaran.
Pero la magia de las elecciones no se detiene ahí.
En su lugar, queremos hacer todo el proceso tan transparente que los medios de comunicación y los observadores internacionales y cualquier persona que lo desee puede descargar todos los datos y contarlos ellos mismos.
Pueden comprobar que todos los votos fueron contados correctamente.
Pueden comprobar que los resultados anunciados de las elecciones son los correctos.
Y éstas son elecciones de la gente, para la gente, por lo que el siguiente paso para nuestras democracias es que sean transparentes y verificables.
Gracias.
(Aplausos)
https://www.ted.com/talks/david_bismark_e_voting_without_fraud/