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Charla «El comercio transatlántico de esclavos: lo que pocos libros de texto te han contado – Anthony Hazard» de TED-Ed en español.
Ver lección completa: http://ed.ted.com/lessons/the-atlantic-slave-trade-what-your-textbook-never-told-you-anthony-hazard
La esclavitud fue una práctica que adoptó muchas formas en todo el mundo, pero el comercio transatlántico de esclavos —con 10 millones de africanos transportados a la fuerza a las Américas— destaca tanto por su alcance mundial como por su legado perdurable. Anthony Hazard discute el impacto histórico, económico y personal de esta gigantesca injusticia histórica.
Lección de Anthony Hazard, animación de NEIGHBOR.
- Autor/a de la charla: Anthony Hazard
- Fecha de grabación: 2014-12-22
- Fecha de publicación: 2019-04-12
- Duración de «El comercio transatlántico de esclavos: lo que pocos libros de texto te han contado – Anthony Hazard»: 323 segundos
Traducción de «El comercio transatlántico de esclavos: lo que pocos libros de texto te han contado – Anthony Hazard» en español.
La esclavitud, el tratamiento de seres humanos como propiedad privada, despojados de sus derechos personales, adoptó muchas formas en todo el mundo.
Pero una institución destaca tanto por su alcance mundial como por su perdurable legado: el comercio transatlántico de esclavos, que se dio desde finales del siglo XV y hasta mediados del siglo XIX, abarcando tres continentes, y llevando a la fuerza a 10 millones de africanos a las Américas.
El impacto que esto dejaría no solo afectó a estos esclavos y a sus descendientes, sino también a las economías e historias de grandes partes del mundo.
Contacto entre Europa y África hubo desde siempre a través del Mediterráneo.
Pero el comercio atlántico de esclavos solo comenzó a finales del siglo XV, con el asentamiento de colonias portuguesas en África occidental, seguido poco después del español en las Américas.
En las nuevas colonias se cultivaban caña de azúcar, tabaco y algodón, cultivos que requerían mucha mano de obra, y no había suficientes colonos o sirvientes contratados para cultivar todos aquellos nuevos terrenos.
Se esclavizó a los nativos americanos, pero muchos murieron por enfermedad, mientras que otros se resistieron eficazmente.
Y así, para satisfacer la gran demanda de mano de obra, los europeos miraron hacia África.
En África ya existía la esclavitud, una práctica antigua que adopta muchas formas.
Algunos esclavos eran sirvientes escriturados por un tiempo limitado y podían comprar su libertad.
Otros se parecían más a los siervos europeos.
En algunas sociedades, los esclavos podían ser parte de la familia de su amo, poseían tierra, e incluso ocupaban cargos de poder.
Pero cuando los barcos mercantes llegaron ofreciendo bienes manufacturados, armas y ron a cambio de esclavos, a los reyes y los comerciantes africanos tuvieron pocos motivos para dudar.
Ellos vieron a los que vendían no como compatriotas africanos, sino como delincuentes, deudores, prisioneros de guerra de tribus rivales.
Al venderlos, los reyes enriquecieron sus propios reinos y los fortalecieron para defenderse de los enemigos vecinos.
Muchos reinos africanos prosperaron con la trata de esclavos, pero la masiva demanda europea creó una intensa competencia.
La esclavitud reemplazó otras sentencias criminales, y la captura de esclavos se convirtió en una causa para la guerra, en lugar de su resultado.
Para defenderse de las razias para la captura de esclavos, los reinos vecinos necesitaron armas de fuego europeas, que también compraron a la vez con los esclavos.
El comercio de esclavos se había convertido en una carrera armamentística, afectando a las sociedades y a las economías a lo largo del continente.
En cuanto a los propios esclavos, se enfrentaron a una brutalidad inimaginable.
Después de ser llevados a fuertes de esclavos en la costa, afeitados para evitar los piojos, y marcados como los animales, eran cargados en barcos con rumbo a las Américas.
Un 20 % de ellos nunca volvería a ver tierra firme.
La mayoría de capitanes de entonces atestaban sus buques, abarrotando su bodegas con cuantos hombres pudieran.
Por la falta de higiene muchos morían o enfermaban y otros eran arrojados por la borda, por estar enfermos o como método disciplinario el capitán aseguraba sus ganancias al cortar las orejas de sus esclavos como prueba fehaciente de la compra.
Algunos esclavos tomaron riendas en el asunto.
Muchos en el continente africano no habían visto un hombre blanco antes y llegaron a pensar que eran caníbales, ya que constantemente se llevaban gente y regresaban por más.
Por miedo a ser devorados o simplemente para evitar más sufrimiento, muchos se suicidaban o se dejaban morir de hambre, convencidos de que después de la muerte, sus almas regresarían a casa.
Los que sobrevivieron, fueron completamente deshumanizados y tratados como mercancía.
Las mujeres y los niños se mantenían en cubierta, y sufrían abusos por parte de la tripulación, mientras que a los hombres se les hacía bailar con el fin de mantenerlos en forma y contener las rebeliones.
Qué pasó con aquellos africanos que llegaron al Nuevo Mundo y cómo el legado de la esclavitud aún afecta a sus descendientes hoy, es bien conocido.
Pero lo que no se discute a menudo es el efecto que tendría la trata de esclavos sobre el futuro de África.
No solo fue que el continente perdiera decenas de millones de habitantes sanos, sino que, al ser los hombres la mayoría de los esclavizados, el efecto demográfico a largo plazo fue aún mayor.
Cuando la trata de esclavos fue finalmente prohibida en las Américas y en Europa, los reinos africanos cuyas economías dependían de ello, colapsaron, dejando la puerta abierta a la conquista y a la colonización.
Además, el aumento de la competencia y la afluencia de armas europeas avivaron la guerra y la inestabilidad que continúan hasta nuestros días.
El comercio atlántico de esclavos también contribuyó al desarrollo del racismo.
La esclavitud en África se entendió como el resultado de un castigo o la guerra entre tribus, pero los europeos que predicaban una religión universal, y que tenían hace mucho tiempo proscrito esclavizar a sus hermanos cristianos, necesitaron una justificación para una práctica tan obviamente en desacuerdo con sus ideales de igualdad.
Así que afirmaban que los africanos eran seres biológicamente inferiores y destinados a ser esclavos, y pusieron mucho empeño en justificar esta teoría.
Así, la esclavitud en Europa y las Américas adquirió una base racial, haciendo imposible que los esclavos y sus futuros descendientes pudieran alcanzar el mismo estatus en la sociedad.
En todos estos aspectos, el comercio transatlántico de esclavos fue una injusticia masiva cuyo impacto continua presente mucho tiempo después de su abolición.
https://www.ted.com/talks/anthony_hazard_the_atlantic_slave_trade_what_too_few_textbooks_told_you/