Saltar al contenido
Deberes escolares » Charlas educativas » El nuevo telescopio que puede mostrar los albores del universo – Charla TEDGlobal 2014

El nuevo telescopio que puede mostrar los albores del universo – Charla TEDGlobal 2014

Charla «El nuevo telescopio que puede mostrar los albores del universo» de TEDGlobal 2014 en español.

¿Cuándo y cómo empezó el universo? Un grupo internacional de astrónomos quiere responder a esa pregunta regresando en el tiempo tanto cuanto permite un nuevo y gigantesco telescopio. Wendy Freedman lideró el proyecto Gigant Magallan Telescope, que se lleva a cabo en América del Sur; en TEDGlobal en Río, comparte su visión audaz acerca de lo que este telescopio puede descubrir sobre el universo.

  • Autor/a de la charla: Wendy Freedman
  • Fecha de grabación: 2014-10-09
  • Fecha de publicación: 2015-08-31
  • Duración de «El nuevo telescopio que puede mostrar los albores del universo»: 938 segundos

 

Traducción de «El nuevo telescopio que puede mostrar los albores del universo» en español.

Cuando tenía 14 años, tenía interés por la ciencia, estaba fascinada por ella, y quería aprender más.

Mi profesor de ciencias en la secundaria nos decía: «Las chicas no tienen por qué escuchar esto».

Sí, alentador.


(Risas)
Elegí no escuchar…

pero solo aquella frase.

Permítanme que les lleve a la cordillera de los Andes chilenos, a unos 500 kilómetros o 300 millas al noreste de Santiago.

Es una zona muy remota, muy árida y es muy hermosa.

No hay mucho allí.

Hay cóndores, hay tarántulas, Y por la noche, cuando la luz se desvanece, deja paso a uno de los cielos más oscuros en la Tierra.

Esta montaña es algo mágico.

Revela una maravillosa combinación de cumbre muy remota y tecnología extraordinariamente sofisticada.

Y nuestros antepasados, desde los inicios de los registros históricos observaron el cielo nocturno y reflexionaron sobre la naturaleza de la existencia.

Y nuestra generación no es diferente.

La única dificultad es que el cielo nocturno, hoy en día, está escondido por el resplandor de las luces de la ciudad.

Así que los astrónomos se refugian en estas cimas muy remotas para observar y estudiar el cosmos.

Los telescopios son, por lo tanto, nuestra ventana al cosmos.

No es un exageración decir que el hemisferio sur será el futuro de la astronomía en el siglo XXI.

Ya tenemos una red de telescopios en las montañas de los Andes en Chile, y que está pronto se completará con una gama sensacional con capacidades renovadas.

Habrá dos grupos internacionales que construirán telescopios gigantes sensibles a la radiación óptica —como son nuestros ojos— habrá un telescopio de rastreo que escaneará el cielo casi todas las noches, habrá radiotelescopios, sensibles a la radiación de radio de onda larga.

También habrá telescopios espaciales sucesores del Telescopio Espacial Hubble; como el Telescopio James Webb, que será puesto en marcha en 2018.

Habrá un satélite llamado TESS listo para descubrir planetas existentes fuera de nuestro sistema solar.

En la última década, he liderado un grupo, un consorcio, un grupo internacional, para construir lo que será, una vez terminado, el telescopio óptico más grande jamás construido.

Se llama Giant Magallanes Telescope, o GMT.

Este telescopio tendrá espejos de 8,4 metros de diámetro, cada uno de los espejos.

Esto equivale a unos 27 pies.

Imaginen esta sala desde el escenario hasta tal vez la cuarta fila.

Cada uno de los siete espejos de este telescopio tendrá unos 8,4 metros de diámetro.

Juntos, los 7 espejos de este telescopio tendrán un diámetro de 24 metros.

Básicamente, el tamaño de todo este auditorio.

Todo el telescopio tendrá unos 43 metros de altura y, de nuevo, al estar en Río, algunos de Uds.

han ido a ver la estatua gigante de Cristo.

Su tamaño es comparable en altura.

De hecho, Cristo es más pequeño de lo que será el telescopio.

Es comparable en tamaño a la Estatua de la Libertad.

Será ubicado dentro de un recinto de 22 plantas, 60 metros de altura, un edificio singular para proteger este telescopio ya que contará con ventanas apuntando hacia el cielo, y girará sobre una base, unas 2000 toneladas de edificio giratorio.

El Telescopio Gigante Magallanes tendrá una resolución 10 veces mayor al Telescopio Espacial Hubble.

Será 20 millones de veces más sensible que el ojo humano.

Y podría, por primera vez en la historia, encontrar vida en planetas ubicados fuera de nuestro sistema solar.

Nos permitirá mirar atrás, hacia la primera luz del universo, literalmente, los albores cósmicos, el amanecer cósmico.

Se trata de un telescopio que nos permitirá mirar hacia atrás, asistir al momento de la formación de las galaxias, los primeros agujeros negros en el universo, las primeras galaxias.

Hemos estado estudiando el cosmos desde hace miles de años, y nos hemos estado preguntando acerca de nuestro lugar en el universo.

Los antiguos griegos nos contaron que la Tierra era el centro del universo.

Hace 500 años, Copérnico reemplazó a la Tierra y puso al Sol en el centro del cosmos.

Y a lo largo de los siglos hemos aprendido más; desde Galileo Galilei, el científico italiano, que fue el primero en apuntar un pequeño telescopio, muy pequeño, de unos 5 centímetros, hacia el cielo, cada vez que hemos construido telescopios más grandes, hemos aprendido algo más sobre el universo, hemos hecho descubrimientos, sin excepción.

En el siglo XX, hemos aprendido que el universo se estaba expandiendo y que nuestro propio sistema solar no está en el centro de esa expansión.

Ahora sabemos que el universo tiene unas 100 000 millones de galaxias, visibles para nosotros, y cada una de esas galaxias cuenta con 100 000 millones de estrellas.

Estamos viendo ahora la imagen más lejana del cosmos jamás tomada; fue tomada con la ayuda del Telescopio Espacial Hubble —apuntando el telescopio a lo que antes era una región vacía en el firmamento antes del lanzamiento del Hubble— y si pueden imaginarse esta pequeña zona, solo representa una quincuagésima parte del tamaño de la luna llena.

Por lo tanto, imaginasen el tamaño de la luna llena.

En la actualidad hay 10 000 galaxias visibles en esta imagen.

Y la baja resolución de esas imágenes y su tamaño reducido se debe solo al hecho de que esas galaxias están muy lejos, a unas distancias enormes.

Y cada una de esas galaxias pueden estar formadas por unos cuantos miles o incluso, cientos de miles de millones de estrellas.

Los telescopios son como máquinas del tiempo: cuanto más lejos miramos en el espacio, más atrás vemos en el tiempo.

Y son como cubos de luz que literalmente recogen la luz.

Por lo tanto, cuanto más grande es el cubo, mayor es el espejo que tenemos, y cuanta más luz podemos ver, más atrás podemos retroceder.

Así, en el último siglo hemos descubierto que hay objetos exóticos en el universo como los agujeros negros, e incluso de la existencia de la materia oscura y la energía oscura, que no podemos ver.

Ahora mismo estáis viendo una imagen real de la materia oscura.


(Risas)
Lo habéis entendido.

No toda clase de público lo hace.


(Risas)
Pudimos detectar la presencia de la materia oscura que no podemos ver debido a una prueba contundente, la tracción debida a la gravedad.

Ahora podemos mirar este universo y vemos este mar de galaxias, es un universo que se expande.

Lo que hago yo es medir la expansión del universo.

Y en uno de los proyectos que llevé a cabo en la década de 1990 fue usar el Telescopio Espacial Hubble para medir la velocidad de expansión del Universo.

Ahora podemos regresar 14 000 millones de años atrás, y hemos aprendido con el tiempo que las estrellas tienen sus propias historias, es decir que nacen, llegan a una mediana edad y que algunas de ellas incluso mueren dramáticamente.

Y las cenizas de esas estrellas de hecho, luego forman las nuevas estrellas que vemos, la mayoría de las cuales tienen planetas girando a su alrededor.

Y uno de los resultados más sorprendentes de los últimos 20 años fue el descubrimiento de que otros planetas giran alrededor de otras estrellas.

Son llamados exoplanetas.

Y hasta 1995, ni siquiera sabíamos la existencia de otros planetas, excepto los que giran alrededor de nuestro propio Sol.

Pero ahora, hay casi otros 2000 planetas que orbitan otras estrellas que ahora podemos detectar, medir su masa, y 500 de ellos son sistemas multiplanetarios.

Y hay 4000 —y seguimos contando— de otros candidatos a planetas que orbitan otras estrellas.

Vienen en una gran variedad de diferentes tipos.

Hay planetas similares a Júpiter que están calientes, hay otros planetas congelados, hay mundos de agua, y hay planetas rocosos como la Tierra, llamados «súper-Tierras», hasta incluso planetas que dicen ser mundos de diamantes.

Así que sabemos que hay al menos un planeta, nuestra propia Tierra, en la que hay vida.

Incluso encontramos planetas orbitando dos estrellas Eso ya no entra en el terreno de la ciencia ficción.

Así que alrededor de nuestro propio planeta, sabemos que hay vida, hemos desarrollado una vida compleja, ahora podemos cuestionar nuestros propios orígenes.

Y dado todo lo que hemos descubierto, los números abrumadores sugieren ahora que puede haber millones, quizás, tal vez incluso cientos de millones de otros [planetas] que están lo suficientemente cerca, a una distancia exacta de la estrella alrededor de la cual orbitan, para tener agua líquida, y tal vez poder albergar vida.

Nos maravillamos ante esta oportunidad, las probabilidades abrumadoras, y lo sorprendente es que en la próxima década, GMT podrá captar espectros de las atmósferas de esos planetas y determinar si tienen o no el potencial para la vida.

Así que,

¿qué es el proyecto GMT?

Es un proyecto internacional.

Incluye Australia, Corea del Sur, y estoy feliz de decir, estando en Río, que el socio más reciente para nuestro telescopio es Brasil.


(Aplausos)
También incluye una serie de instituciones de EE.UU.

Incluyendo la Universidad de Harvard, el Instituto Smithsonian y el Instituto Carnegie, las universidades de Arizona, Chicago, Texas-Austin y Texas A&M.

Chile también participa.

El proceso de fabricación de los espejos del telescopio es igual de fascinante que el telescopio mismo.

Se toman trozos de vidrio y se funden en un horno giratorio.

Esto sucede debajo del estadio de fútbol de la Universidad de Arizona.

Está escondido debajo de 52 000 asientos.

Nadie sabe lo que está sucediendo.

Prácticamente es un caldero giratorio.

Los espejos se moldean y se enfrían muy lentamente, y luego se pulen con una exquisita precisión.

Para tener una idea de la precisión de estos espejos las protuberancias en el espejo, lo largo de casi todos los 8,4 metros representan menos de una millonésima de pulgada.

Para darles una idea…

¡Ay!
(Risas)
Esta es una quinta milésima del ancho de uno de mis cabellos lo largo de casi todos los 8,4 metros.

Es un logro espectacular.

Es lo que nos permite disponer de esta precisión.

Pero

¿qué ganamos con tal precisión?

El TGM, para tener una idea…

Si les mostrara una moneda, y resulta que tengo una, al mirar la cara de la moneda, puedo ver desde aquí qué está escrito en ella, puedo ver la cara de esa moneda.

Y apuesto que esto, incluso los de la primera fila, no pueden verlo.

Pero si recurrimos al Telescopio Gigante Magallanes el total de estos 25 metros que vemos en este auditorio, y apuntáramos a 300 kilómetros de distancia, si estuviéramos en Sao Paulo, podríamos ver la cara de la moneda.

Esa es la resolución extraordinaria y el poder de este telescopio.

Y si fuéramos…


(Aplausos)
Si un astronauta estuviera en la Luna, a casi 400 000 kilómetros de distancia y encendería una vela, una sola vela, entonces seríamos capaces de detectarla usando el TGM.

Todo un logro.

Este es un imagen simulada de un grupo en una galaxia cercana —»cerca» en términos astronómicos, es relativo, son decenas de millones de años luz de distancia— aquí es cómo se vería.

Miren estos 4 objetos brillantes y ahora compárenlos con la imagen tomada por una cámara del telescopio espacial Hubble.

Empiezan a sobresalir pequeños detalles.

Y, por último, —tengan en cuenta el drástico efecto— veamos qué puede ver el increíble TGM.

Miren de nuevo estas imágenes brillantes.

Esto es lo que vemos a través de uno de los telescopios más potentes de la Tierra Y esto, una vez más, lo que verá el GMT.

Precisión extraordinaria.

Así que,

¿dónde estamos?

Hemos nivelado la parte superior de la cima de la montaña en Chile.

Hemos quitado la cumbre.

Hemos probado y pulido el primer espejo.

Hemos fundido el segundo y tercer espejos.

Y estamos a punto de empezar el cuarto espejo.

Tuvimos una serie de revisiones este año, vinieron jurados internacionales para evaluarnos, y nos dijeron: «Ya están listos para empezar a construir».

Así que tenemos la intención de construir este telescopio con los cuatro primeros espejos.

Queremos darle uso inmediatamente y recoger datos científicos.

Lo que los astrónomos llamamos «la primera luz», en 2021.

El telescopio estará totalmente listo a mediados de la próxima década con sus siete espejos.

Así que ahora estamos preparados para mirar atrás en el universo lejano, hacia los albores del universo.

Estudiaremos otros planetas con exquisito detalle.

Pero para mí, una de las cosas más emocionantes acerca de la construcción del GMT es la oportunidad de descubrir algo que no sabemos y que no podemos ni siquiera imaginar, algo completamente nuevo.

Y espero que con la construcción de este y de otras instalaciones muchos jóvenes se sientan inspiradas e inspirados para apuntar a las estrellas.

Muchas gracias.

Obrigado.


(Aplausos)
Bruno Giussani: Gracias, Wendy.

Quédate conmigo, porque tengo una pregunta para ti.

Mencionaste diferentes equipos.

Se está construyéndose el telescopio Magallanes pero también ALMA y otros en Chile y en otros lugares, incluso en Hawái.

¿Se trata de cooperación y complementariedad, o competencia?

Sé que hay competencia en términos de financiación, pero

¿qué pasa con la ciencia?

Wendy Freedman: En cuanto a la ciencia, son muy complementarios.

Los telescopios que se encuentran en el espacio, los telescopios en tierra, con diferentes capacidades de longitud de onda, Incluso los telescopios similares, pero con diferentes herramientas, todos miran a diferentes partes de las preguntas que hacemos.

Cuando descubrimos otros planetas podemos probar estas observaciones, podemos medir las atmósferas, y mirar hacia el espacio en alta resolución.

Son muy complementarios.

Tienes razón acerca de los fondos, estamos compitiendo.

Pero desde un punto de vista científico, nos complementamos.

BG: Wendy, muchas gracias por venir a TEDGlobal.

WF: Gracias.


(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/wendy_freedman_this_telescope_might_show_us_the_beginning_of_the_universe/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *