Saltar al contenido
Deberes escolares » Charlas educativas » El primer espacio para fabricantes de Kenia y sus historias de éxito – Charla TEDGlobal 2017

El primer espacio para fabricantes de Kenia y sus historias de éxito – Charla TEDGlobal 2017

Charla «El primer espacio para fabricantes de Kenia y sus historias de éxito» de TEDGlobal 2017 en español.

África necesita ingenieros, pero sus estudiantes de ingeniería suelen trabajar en empresas de auditoría y bancos. ¿Por qué? Kamau Gachigi sospecha que es porque no tienen los espacios y materiales que necesitan para probar sus ideas y empezar nuevos negocios. Para resolver este problema Gachigi creó Gearbox, un espacio para fabricantes y acelerador de hardware que provee un ambiente en el que tanto profesionales como gente sin conocimientos de ingeniería pueden hacer prototipos rápidamente. En esta charla de avanzada Gachigi comparte algunos proyectos e innovaciones extraordinarios que han salido de su Fab Lab keniano.

  • Autor/a de la charla: Kamau Gachigi
  • Fecha de grabación: 2017-08-27
  • Fecha de publicación: 2017-12-13
  • Duración de «El primer espacio para fabricantes de Kenia y sus historias de éxito»: 799 segundos

 

Traducción de «El primer espacio para fabricantes de Kenia y sus historias de éxito» en español.

Para el año 2050 la población de África se habrá duplicado.

Una de cada cuatro personas de la Tierra será africana y esto es realmente emocionante e intimidante al mismo tiempo.

Es emocionante porque por primera vez en la era moderna habrá suficientes africanos en la Tierra para que sean ellos los abusivos.


(Risas)
Estoy bromeando.

Es intimidante porque necesitaremos economías que puedan sustentar ese crecimiento poblacional y mucha de la gente será muy joven.

La mayoría de los Gobiernos de África tiene un plan para este crecimiento económico, en Kenia llamamos al nuestro Vision2030, y todos se basan en la industrialización.

La cosa es que el mundo está pasando por su cuarta revolución industrial, lo que significa que hay una fusión de los mundos físico, cibernético y biológico.

Lo que significa que debido a la intercomunicación masiva y a la disponibilidad de inteligencia artificial y robots muchos de los trabajos que conocemos ahora no existirán en el futuro.

Así que el reto es mucho mayor, en muchos sentidos, que cuando Asia se estaba industrializando, por ejemplo.

Además, un tipo de persona que se necesita para una industrialización es un ingeniero y hay un déficit de ellos en el continente.

Si se compara el número de ingenieros que esos mismos países asiáticos tenían cuando se estaban industrializando hace un par de décadas, nosotros nos quedamos cortos.

Yo he sido profesor desde hace algún tiempo y muchos de mis estudiantes que cursan ingeniería terminan trabajando en empresas de auditorías y bancos y muchos pasan la mitad de su tiempo haciendo contabilidad y cosas por el estilo mientras estudian.

Yo tuve la buena fortuna de estudiar mi carrera y hacer mi posgrado en el Reino Unido y EE.UU.; en países, ambientes con todo el equipo requerido, toda la sofisticación de los sistemas.

De ahí trabajé tres años en Japón, en Investigación y Desarrollo en una gran empresa.

Así que estaba acostumbrado a los buenos equipos y de ahí regresé a casa y me uní a la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Nairobi porque quería contribuir y estar en el continente.

Y pronto me di cuenta de que resultaba superfluo porque no había todo el equipo al que me había acostumbrado.

Y le enseñaba a estudiantes que tenían ideas brillantes y que presentaban cosas que, de tener el equipo suficiente, yo sabía que podrían realmente contribuir con el reto de la industrialización.

Así que tuve que cambiar de rol y usar mi lado empresarial.

Empecé a buscar el dinero para comprar el equipo que necesitábamos.

Y escuché un concepto llamado Fab Labs salido de la universidad MIT de Boston.

Son laboratorios de fabricación digital que permiten, en espacios pequeños y con equipos baratos, que la gente tenga acceso a estas herramientas para que sean capaces de fabricar casi cualquier cosa.

Y pude convencer a un oficial del Gobierno para que comprara uno de esos para la universidad en la que yo enseñaba.

En seguida tuvimos magníficos resultados, vimos todo tipo de innovaciones.

Y por primera vez, en el contexto de la universidad, los estudiantes de ingeniería de distintas disciplinas hacían prácticas y laboratorio juntos en el mismo espacio.

Normalmente estaban separados.

Y no solo eso, sino que estudiantes que no eran ingenieros también trabajaban en el mismo espacio y gente que no tenía nada que ver con la universidad venía a este espacio.

Había esta mezcla enriquecedora de gente, gente con distintas maneras de pensar, lo que siempre es bueno para la innovación.

Estaba de lo más orgulloso con todo esto, así que podrán imaginarse mi sorpresa cuando un día el decano de ingeniería vino y me dijo: «Kamau, los estudiantes que pasan la mayor parte de su tiempo en el Fab Lab están reprobando los exámenes».

Dije: «

¿Qué quieres decir?

» Investigué y tenía razón.

Estaban reprobando porque habían afinado tanto sus habilidades en ciertas áreas que iban a la ciudad y ofrecían sus servicios a cambio de dinero.

Estaban ganando dinero y, por lo tanto, no se estaban enfocando en sus estudios.

Y pensé: «¡Qué buen problema!»
(Risas)
No me citen esa frase, soy académico.

Necesitábamos que esto creciera y en la universidad las cosas eran un poquito burocráticas, así que me mudé y me conecté con gente que, en Nairobi, proveía espacios para expertos en informática con Internet rápida y cosas por el estilo.

Y algunos de estos espacios son bastante famosos, han hecho a Kenia famosa por su informática.

Juntos creamos un espacio que estamos adecuando ahora.

Nos mudamos de donde estábamos, ahora tenemos un lugar más grande y estamos haciendo asequibles un gran rango de equipos, incluyendo las herramientas de fabricación digital y herramientas análogas; disponibles para todos a través de una membresía.

Es como un gimnasio, cuando vas, pagas, te enseñan cómo usar el equipo y de ahí eres libre para innovar y hacer lo que quieras y no necesitas ser un ingeniero.

Algunas personas que van están creando una pequeña compañía, solo necesitan un espacio y nosotros lo proveemos por un precio.

Otros usan espacios más grandes donde instalan sus oficinas.

Están más adelantados, tal vez sus compañías han estado funcionando por algún tiempo.

Y somos capaces de acomodar todo esto en un espacio innovador que es bastante activo.

Aquí ven a Douglas.

Douglas es un ingeniero eléctrico, una de las personas que era muy activa en el Fab Lab.

Estoy seguro de que aprobó sus exámenes.

Y la imagen de arriba a la izquierda es una lámina de cobre.

Diseñó un circuito para un cliente que le dijo: «Necesito un circuito para un sistema en el que se pague por tandas».

Así que este es un modelo de negocios que ha hecho que los bienes y servicios sean mucho más asequibles para la gente pobre porque pueden pagar un poquito, por ejemplo un dolar al día, por un servicio específico.

Y esta compañía quería un prototipo para una idea nueva que tenían.

Solo necesitaban 50 circuitos y lo contrataron a él para que los hiciera.

En la foto lo ven… es capaz de diseñar el circuito en la computadora, después lo transfiere mediante un proceso de grabado, que es la imagen de arriba a la derecha.

Y de ahí, llena el tablero usando este robot.

Lo que quizá tomaría un día soldar a mano lo hace con esta máquina en minutos.

Así que pudo completar toda la orden en nuestro espacio Gearbox, y eso es muy importante porque si no fuera por lo que proveemos ahora hubiera tenido que contratar a una compañía en China para hacer esto.

Y porque es una orden pequeña hubiera tomado más tiempo.

Hubiera sido un compañía pequeña porque las grandes no aceptan órdenes pequeñas e, incluso ahí, de recibir una orden grande después lo hubieran dejado esperando.

También está el problema del lenguaje, etc.

Así que ser capaz de hacerlo en el país propio es realmente importante y, por supuesto, hacer un modelo es una de las fases de una idea de negocios y es muy importante porque puedes regresar y hacer correcciones.

En esta imagen… gracias.


(Aplausos)
En la imagen de arriba a la izquierda ven una rendición en 3D de una máquina de fabricación digital.

En esta instancia también es un cortador de plasma y un cortador de madera.

La cortadora de plasma hace posible cortar placas y láminas de metal.

Básicamente, si haces un diseño en la computadora y se lo mandas a la máquina esta cortará las siluetas que quieras de manera rápida y precisa.

Pero en esta máquina en particular puedes cambiar el cortador de plasma por un huso para que puedas tallar madera.

Esto fue diseñado por mi Jefe de Ingeniería, su nombre es Wachira y cuando lo contraté hace unos dos años le dije: «Solo dame dos años y cuando hayas entrenado a mucha gente, y haya muchas personas bajo tu mando, entonces te vas y te conviertes en una buena historia para contar».

Y eso pasó.

Tiene dos tipos de compradores.

El comprador de más alto nivel es una compañía que usa su máquina para cortar láminas de metal para fabricar camiones Isuzu en Nairobi, bajo la dirección de General Motors.

Así que estamos muy orgullosos de poder decir que tenemos un fabricante de equipos originales en Nairobi que ha proveído lo que es, en efecto, un robot industrial que suple de piezas a General Motors.

Esto es muy importante…
(Aplausos)
es importante porque siendo el crecimiento poblacional lo que es muchas grandes compañías están viendo de cerca el mercado que crece en África.

Así que en Kenia ahora tenemos a Volkswagen, Peugeot, Renault, a Mercedes haciendo camiones, a Toyota que está allí desde hace tiempo.

Todos esos fabricantes planean ensamblar vehículos y, en el futuro, fabricar en el país.

Varios planean entrenar a mucha gente cuando la contraten, que es importante para la economía.

Pero lo realmente mágico ocurrirá cuando estas compañías empiecen a comprar las partes que necesitan para los vehículos a las compañías locales.

Así que desarrollar la cadena de suministros es realmente importante para que podamos tener economías muy productivas.

Y estamos enfocados en eso en nuestro espacio.

Esta imagen muestra el otro tipo de cliente quel tiene.

Arriba a la izquierda están personas que usan herramientas rudimentarias para trabajar metal y madera.

Kenia tiene una población de cerca de 44 millones de personas.

La fuerza laboral es de 13 millones y entre el 80 y 90 % de ellos está en el sector informal.

Lo que ven en esa imagen es típico de los artesanos semicalificados que hacen productos para el mercado que son toscos.

La tasa de producción es muy lenta, la calidad del producto no es alta.

Así que asociamos a Wachira con un banco.

Y el banco le está pagando para que entrene a gente de este sector en el uso de este robot industrial.

El resultado es que algunos de ellos van a obtener préstamos para comprarse estas máquinas.

Otros irán a centros donde podrán llevar sus materiales, imprimir su diseño y, rápidamente, regresar con los materiales que ya están listos para ensamblarlos en sus propios locales.

Por ejemplo, alguien que hace un portón de metal puede demorarse una semana en hacer una puerta, pero con la máquina haría 10 puertas en un día.

Así que la productividad de una gran parte de la población podría hacer un salto cuántico en lo que respecta a cantidad gracias a esta máquina.

Y estamos recién comenzando, así que es muy emocionante.

Esta es otra persona que usa nuestro espacio.

Se llama Esther, tiene veintitantos años y tiene una gran pasión por un problema que nos explicó.

Dijo que la chicas faltan muchos días a la escuela debido a su ciclo menstrual porque no pueden comprar toallas sanitarias.

La razón que nos dio fue que los fabricantes empacan las toallas en grupos de 7 a 10.

Separarlas en las tiendas sería poco higiénico y empaquetarlas individualmente es demasiado caro.

Así que pensó en una solución que es brillante y simple.

¿Por qué no usamos máquinas expendedoras?

Ella, en un ambiente muy limpio, puede dividir los paquetes y llenar las máquinas expendedoras para que las chicas puedan comprar las toallas sanitarias en la privacidad de un baño, espacio público, escuela, etc.

Hizo un prototipo para esto que funcionó extremadamente bien y ha sido capaz de ir solucionando las fallas.

Así que lo importante aquí es que es posible hacer prototipos.

No es ingeniera, empleó a la gente de nuestro espacio para que la ayude y ahora está trabajando con una aceleradora de empresas, así que esperamos grandes resultados.


(Aplausos)
Esta imagen que ven es el resultado de un proyecto de posgrado hecho en la Universidad de Nairobi por Tony Nyagah, un estudiante de ingeniería.

Integró una célula solar en una teja de techo y decidió convertirlo en un negocio.

Se asoció con su hermana, que es arquitecta, y tienen este negocio.

Presentan la teja a una persona que está construyendo y le dicen: «Puedes comprarla por el costo de la teja sin el panel solar», así que la dan en descuento y las fabrican usando el Internet de las cosas.

Con el tiempo, con la instalación se paga un tercio de la tarifa de electricidad y se puede vender el exceso de energía a la red eléctrica nacional.

Así que ganarán su dinero con el tiempo.

Ya han hecho varias instalaciones.

Estuvimos muy orgullosos de poder enseñarle esto a alguien medio famoso, ahí lo pueden ver, y este otro tipo famoso presentó la misma idea, pero consideramos que lo hizo después que nosotros, así que…
(Risas)

(Aplausos)
Para cerrar: hacer prototipos y fabricar a bajo costo en este tipo de ambiente es muy importante para el proceso de industrialización.

Pero también aprovechamos muchas de las nuevas maneras de hacer las cosas: el movimiento Open Source, la fabricación local y economía circular.

Todo eso es importante no solo para industrializarse y para satisfacer las necesidades de la gente, sino también para proteger al medio ambiente.

También nos interesa la cultura.

Tenemos muchas discusiones en nuestro espacio sobre quiénes éramos como africanos, quiénes somos y quiénes queremos ser.

Hablamos de consumismo, etnicidad, corrupción, etc.

Pensamos que nosotros le añadimos valor a la gente al enseñarles a añadir valor a las cosas o materiales para que puedan construir cosas que importan.

Muchísimas gracias por su atención.


(Aplausos)
Gracias.


(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/kamau_gachigi_success_stories_from_kenya_s_first_makerspace/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *