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La NSA responde a Edward Snowden – Charla TED2014

Charla «La NSA responde a Edward Snowden» de TED2014 en español.

Luego de la sorpresiva aparición de Edward Snowden en TED2014, Chris
Anderson dice: «Si la NSA quiere responder, por favor, que lo haga». Y
sí, lo hizo. Apareciendo en video, el subdirector de la NSA, Richard
Ledgett, responde las preguntas de Anderson sobre el equilibrio entre
la seguridad y la protección de la privacidad.

  • Autor/a de la charla: Richard Ledgett
  • Fecha de grabación: 2014-03-20
  • Fecha de publicación: 2014-03-21
  • Duración de «La NSA responde a Edward Snowden»: 2010 segundos

 

Traducción de «La NSA responde a Edward Snowden» en español.

Chris Anderson: Tuvimos aquí a Edward Snowden hace un par de días, y es el momento de la respuesta.

Varios de Uds.

me han escrito con preguntas para hacerle a nuestro invitado de la NSA.

Richard Ledgett es el 15° subdirector de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), allí es funcionario civil de alto nivel, se desempeña como director de operaciones, orienta estrategias, establece políticas internas, y es el principal asesor del director.

Y, si todo va bien, bienvenido, Rick Ledgett, a TED.

(Aplausos) Richard Ledgett: Estoy muy agradecido de poder hablar aquí con la gente.

Espero con interés la conversación, así que gracias por organizar eso.

CA: Gracias, Rick.

Apreciamos que te sumes.

Sin duda es toda una declaración de peso que la NSA está dispuesta a mostrar una cara más abierta aquí.

Viste, creo, la charla y entrevista que dio Edward Snowden aquí hace un par de días.

¿Qué te pareció? RL: Creo que fue interesante.

No nos dimos cuenta de que aparecería por allí, así que felicitaciones por organizar una linda sorpresa como esa.

Creo que, al igual que muchas de las cosas surgidas desde que el Sr.

Snowden empezó a divulgar información clasificada, hubo algunos resquicios de verdad en lo dicho, pero también muchas extrapolaciones y verdades a medias, y me interesa ayudar a abordar esos puntos.

Creo que es una conversación realmente importante la que estamos entablando en EE.UU.

y a nivel internacional, y creo que es importante, y de importancia, y por eso tenemos que lograr que sea una conversación basada en hechos y queremos ayudar a que eso ocurra.

CA: La pregunta que muchos nos hacemos aquí es ¿cuáles crees que son las motivaciones de Snowden para hacer lo que hizo? ¿Tenía alguna manera alternativa de hacerlo? RL: Absolutamente, tenía maneras alternativas de hacerlo, y en realidad creo que caracterizarlo como un soplón realmente daña las actividades de denuncia legítimos.

¿Y si los empleados de la NSA…

y hay más de 35 000 empleados…

todos grandes ciudadanos.

Son como sus esposos, padres, hermanas, hermanos, vecinos, sobrinos, amigos y parientes, todos interesados ​​en hacer lo correcto por su país y por nuestros aliados internacionales, y hay muchos lugares a dónde dirigirse si alguien tiene alguna preocupación.

En primer lugar, está su supervisor, y una cadena de supervisión en su organización.

Si alguien no se siente cómodo con eso, hay una serie de inspectores generales.

En el caso del Sr.

Snowden, tenía la opción del inspector general de la NSA, el inspector general de la Armada, el inspector general del Comando del Pacífico, el inspector general del Departamento de Defensa, y el inspector general de la comunidad de inteligencia, alguno de ellos habría mantenido tanto sus preocupaciones en canales clasificados como estado feliz de abordarlas.

(CA y RL hablan a la vez) Tenía la opción de ir a las comisiones del Congreso, existen mecanismos para hacerlo, pero no hizo nada de esto.

CA: Mencionaste que Ed Snowden tenía otras vías para elevar sus inquietudes.

Un par de cosas en respuesta a eso: uno, él ciertamente cree que, como contratista, las vías disponibles para él como empleado no estaban disponibles; dos, hay un historial de otros denunciantes, como [Thomas Andrews Drake] tratados muy duramente, según algunos; y, tres, no denunciaba una falla específica que había descubierto, sino programas aprobados por los tres poderes del gobierno.

Digo, en esa circunstancia, ¿no podría argumentarse que lo que hizo fue razonable? RL: No, no estoy de acuerdo.

Creo que las…

lo siento, recibo retorno por ese micrófono…

las acciones que emprendió fueron inapropiadas porque puso vidas en riesgo, básicamente, a largo plazo, y sé que hablan mucho, el Sr.

Snowden y algunos periodistas, dicen que las revelaciones no han puesto en riesgo a la seguridad nacional ni a la gente, y eso no es categóricamente cierto.

Las pusieron en riesgo.

Creo también que es de una arrogancia increíble la idea de que él conoce mejor que los redactores de la Constitución cómo debería diseñarse y funcionar el gobierno para una separación de poderes y que el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo tienen que trabajar juntos, con controles y equilibrios entre ellos, y luego el Poder Judicial, que supervisa todo el proceso.

Creo que es extremadamente arrogante de su parte.

CA: ¿Puede dar un ejemplo específico de cómo puso en riesgo la vida de la gente? RL: Sí, claro.

Sus revelaciones, las capacidades…

la NSA es una organización basada en capacidades, por eso cuando tenemos objetivos de inteligencia extranjeros…

elementos de interés legítimo como los terroristas, es el ejemplo emblemático, pero pueden ser traficantes de personas, narcotraficantes, personas que tratan de construir armamento avanzado, armas nucleares, y que para ello construyen sistemas de entrega, y los estados-nación que podrían ejercer agresión contra sus vecinos, que es posible que tenga un poco de visibilidad en algo de lo que está pasando en este momento, las capacidades se aplican en formas muy discretas, medidas y controladas.

Por eso, divulgar esas capacidades sin restricciones implica que los adversarios las vean y reconozcan: «Oye, yo podría ser vulnerable a esto», y las aludan.

Hemos visto objetivos en el terrorismo, en la zona del estado-nación, en contrabandistas de varios tipos, y otra gente que, debido a las divulgaciones, han eludido nuestra capacidad de detectar lo que están haciendo.

El efecto neto de eso es que nuestra gente que está en el extranjero en lugares peligrosos, sean diplomáticos o militares, y nuestros aliados que están en situaciones similares, corren un gran riesgo porque no vemos las amenazas que se les vienen.

CA: Esa es una respuesta general que dice que debido a sus revelaciones, el acceso que Uds.

tenían a cierto tipo de información se ha terminado, se ha cerrado.

Pero la preocupación es que la naturaleza de ese acceso no era necesariamente legítimo en primera instancia.

O sea, descríbenos este programa Bullrun en el que se afirma que la NSA específicamente debilitaba la seguridad para obtener el tipo de acceso del que hablabas.

RL: Existen, cuando nuestros objetivos de inteligencia extranjeros legítimos del tipo que he descrito antes, usan el sistema mundial de telecomunicaciones como metodología de comunicaciones, y lo hacen porque es un gran sistema, es el sistema más complejo creado por el hombre, es una maravilla, y muchos de los presentes en la sala son responsables de su creación y mejoramiento…

sencillamente es una cosa maravillosa.

Pero también es usada por personas que trabajaron en contra de nosotros y de nuestros aliados.

Y si voy a perseguirlos, necesito tener la capacidad de ir tras ellos, y, de nuevo, los controles están en la forma de aplicar esa capacidad, no en que tenga la capacidad en sí.

De lo contrario, si pudiéramos acorralar a los chicos malos en un rincón de Internet, podríamos tener un dominio, chicomalo.com.

Sería increíble, y podríamos centrar todos los esfuerzos allí.

Pero no funciona así.

Ellos tratan de ocultarse de la capacidad del gobierno para aislar e interceptar sus acciones, por eso tenemos que movernos en ese mismo espacio.

Pero te diré algo: La NSA tiene 2 misiones.

Una es la misión de Inteligencia de Señales de la que, lamentablemente, hemos leído tanto en la prensa.

La otra misión es el Aseguramiento de Información, que consiste en proteger los sistemas de seguridad nacional de EE.UU., es decir cosas como las comunicaciones que usa el presidente, las comunicaciones que controlan nuestras armas nucleares, las comunicaciones que usan nuestros militares en el mundo, y las comunicaciones que usamos con nuestros aliados, y las que usan algunos de nuestros aliados.

Por eso recomendamos qué estándares usar, y usamos esos mismos estándares, e invertimos en asegurar que esas comunicaciones sean seguras para los fines previstos.

CA: Pareces estar diciendo que si se trata de Internet como un todo, cualquier estrategia vale si mejora la seguridad de Estados Unidos.

Y creo que en parte a eso se debe que haya tal división de opiniones, que haya tantas personas en esta sala y en todo el mundo que piensan de manera muy diferente sobre Internet.

Lo ven como una invención trascendental de la humanidad, a la par con la Imprenta de Gutenberg por ejemplo.

Es el portador de conocimiento para todos.

Es el conector de todos.

Se ve en estos términos idealistas.

Y desde esa óptica, lo que ha hecho la NSA es el equivalente a que aquellas autoridades alemanas pusieran algún dispositivo en la imprenta que revelara qué libros compró la gente y qué leen.

¿Puedes entender que, desde ese punto de vista, parece una barbaridad? RL: Entiendo eso, realmente comparto la mirada utilitaria de Internet, y yo diría que es más grande que Internet.

Es un sistema mundial de telecomunicaciones.

Internet en gran parte es eso, pero es mucho más.

Creo que la gente tiene preocupaciones legítimas sobre el equilibrio entre la transparencia y lo secreto.

Y lo ha expresado como un equilibrio entre la privacidad y la seguridad nacional.

No creo que ese sea el enfoque correcto.

Creo que se trata de la transparencia y lo secreto.

Y esa es la conversación que entablamos en el ámbito nacional e internacional y en la que queremos participar y queremos que la gente participe de manera informal.

Hay cosas, permíteme hablar de eso un poco más, hay cosas que necesitamos sean transparentes: nuestras autoridades, nuestros procesos, nuestra supervisión, quiénes somos.

Como NSA no hemos trabajado bien en eso y creo que esa es en parte la razón de que esto causara tanta novedad y repercusión en los medios.

No nos conocían.

Éramos No Such Agency [la no agencia], Never Say Anything [nadie dice nada].

Hay versiones de nuestro logo con un águila que tiene auriculares.

Esa es la caracterización pública.

Por eso tenemos que ser más transparentes en esas cosas.

Donde no tenemos que ser transparentes, porque es malo para EE.UU., y es malo para los países que trabajan con nosotros y a los que les proveemos información que les ayuda a cuidar su seguridad y a su gente, es en la exposición de operaciones y capacidades que le permita a las personas contra las que trabajamos, los generalmente llamados chicos malos, contrarrestarlas.

CA: ¿Pero no es también malo asestar una especie de golpe a las empresas de EE.UU.

que básicamente le han dado al mundo la mayoría de los servicios importantes de Internet? RL: Lo es.

Realmente las empresas están en una posición difícil, como nosotros, porque las obligamos a brindar información, como hace cualquier otra nación del mundo.

Todas las naciones industrializadas del mundo tiene un programa de intercepción legal que le exige a las empresas que les brinde la información que necesitan para su seguridad, y las empresas involucradas han cumplido con los programas de la misma manera en que lo tienen que hacer cuando operan en Rusia, en el Reino Unido, en China, en India o en Francia.

Cualquier país que elijas.

Pero como estas revelaciones han sido caracterizadas como: «no puedes confiar en la empresa A porque peligra tu privacidad con ellos» eso solo es exacto en el sentido en que ocurre exactamente con cualquier otra empresa en el mundo que interactúe con esos países del mundo.

Y la gente lo aprovecha como una ventaja comercial, y muchos países lo presentan de esa manera, incluso algunos de nuestros aliados, cuando dicen: «Oye, no puedes confiar en EE.UU., pero puedes confiar en nuestra empresa de telecomunicaciones, porque somos seguros».

Y en realidad usan eso para contrarrestar la gran ventaja tecnológica que tienen las empresas de EE.UU.

en áreas como la nube y las tecnologías de Internet.

CA: Estás sentado allí con la bandera de Estados Unidos, y la Constitución de EE.UU.

garantiza la libertad de requisas o confiscaciones infundadas.

¿Cómo caracterizas el derecho del ciudadano de EE.UU.

a la privacidad? ¿Existe tal derecho? RL: Sí, claro que existe.

Le dedicamos una excesiva cantidad de tiempo y presión, excesiva y apropiada, debería decir, cantidad de tiempo y esfuerzo para garantizar que protegemos esa privacidad.

Y, más allá de eso, la privacidad de ciudadanos del mundo, no solo de EE.UU.

Aquí intervienen varias cosas.

Primero, estamos todos en la misma red.

Mis comunicaciones, Soy usuario de un servicio de correo electrónico de Internet en particular que es el preferido de los terroristas del mundo, el número uno.

Estoy a su lado en el espacio de correo en Internet.

Por eso tenemos que poder separarlos y encontrar la información relevante.

Al hacerlo, necesariamente encontraremos ciudadanos de EE.UU.

y extranjeros inocentes que solo van a lo suyo, y tenemos procedimientos que descartan eso, que dicen, cuando uno encuentra eso, no si lo encuentra, cuando lo encuentra, porque uno está seguro de encontrarlo, así se protege eso.

Se denominan procedimientos de minimización.

Están aprobados por el fiscal general y tienen base constitucional.

Así que los protegemos.

Y luego, las personas, los ciudadanos del mundo que realizan negocios lícitos cotidianamente, el presidente en su discurso del 17 de enero expuesto algunas protecciones adicionales que les estamos ofreciendo.

Creo absolutamente que la gente tiene derecho a la privacidad y que trabajamos arduamente para asegurar que se proteja ese derecho a la privacidad.

CA: ¿Qué pasa con los extranjeros que usan servicios de Internet de empresas de EE.UU.? ¿Tienen derecho a la privacidad? RL: Lo tienen.

En el sentido en que la única forma en que podemos obligar a esas empresas a brindarnos información es cuando la persona cae en una de tres categorías: Podemos identificar a esta persona en particular con algún tipo de selector, si está vinculado con contraterrorismo o proliferación u otro objetivo extranjero de inteligencia.

CA: Se ha hablado mucho del hecho de que mucha de la información obtenida con estos programas, son en esencia metadatos.

No son necesariamente las palabras reales que uno ha escrito en un correo o dicho en una llamada telefónica.

Se trata de a quién escribieron, cuándo, etc.

Pero se ha esgrimido, alguien aquí en la audiencia ha dicho, un ex-analista de la NSA que dijo los metadatos son mucho más invasivos que los datos puros, porque en los datos puros uno se presenta como quiere presentarse.

Con los metadatos, ¿quién sabe cuál es la conclusión que se saca? ¿Hay algo de eso? RL: Yo realmente no entiendo ese argumento.

Creo que los metadatos son importantes por un par de razones.

Los metadatos son la información que te permite encontrar las conexiones que la gente trata de ocultar.

Por eso cuando un terrorista escribe a alguien que no conocemos pero realiza o apoya actividades terroristas, o alguien que viola sanciones internacionales proporcionando material para armas nucleares a un país como Irán o Corea del Norte, trata de ocultar esa actividad porque es ilícita.

Los metadatos te permiten hacer esa conexión.

La alternativa a eso es mucho menos eficiente y mucho más invasiva de la privacidad, es la acumulación gigantesca de contenido.

Los metadatos, en ese sentido, mejoran la privacidad.

Y a diferencia de lo que sostienen algunas publicaciones, no nos sentamos a desmenuzar perfiles de metadatos de la gente común.

Las personas que no están relacionadas con un objetivo válido de inteligencia, no son de nuestro interés.

CA: Entonces, en materia de amenazas que enfrenta EE.UU.

en general, ¿en qué lugar ubicarías al terrorismo? RL: Creo que el terrorismo aún está primero.

Creo que nunca hemos estado en un tiempo con tantos lugares en los que las cosas van mal y se forma un caldo de cultivo para terroristas que se aprovecha de la falta de gobernabilidad.

Un antiguo jefe mío, Tom Fargo, el almirante Fargo, solía describirlos como arcos de inestabilidad.

Hoy tenemos muchos arcos de inestabilidad en el mundo, en lugares como Siria, donde hay una guerra civil en curso y llegan ingentes cantidades, miles y miles de combatientes extranjeros que llegan a Siria para aprender a ser terroristas y practicar esa actividad, y muchas de esas personas son occidentales que tienen pasaporte de países europeos o en algunos casos de EE.UU., y que básicamente aprenden a hacer la yihad y han expresado la intención de salir para luego volver y hacerla en sus países.

Hay lugares como Irak, que está sufriendo de un alto nivel de violencia sectaria, y, de nuevo, es caldo de cultivo para el terrorismo.

Hay actividad en el Cuerno de África en la zona del Sahel, en África.

De nuevo, una gobernabilidad muy débil que es caldo de cultivo para la actividad terrorista.

Por eso creo que es muy grave.

Creo que está primero.

Segundo creo que está la amenaza cibernética.

Es una amenaza en tres formas: Una forma, probablemente la más común, la más conocida por la gente, es el robo de propiedad intelectual.

Básicamente, países extranjeros que vienen roban secretos empresariales, y luego brindan esa información a empresas del gobierno o empresas relacionadas con el gobierno para ayudarles a dar el salto tecnológico u obtener inteligencia de negocios usada para ganar contratos en el extranjero.

Son actividades enormemente onerosas que están ocurriendo ahora mismo.

Varios estados-nación están haciendo esto.

Luego están los ataques de denegación de servicio.

Quizá estén al tanto de que ha habido una crecida de estos ataques contra el sector financiero de EE.UU.

desde 2012.

De nuevo, es una nación-estado que ejecuta estos ataques y lo hacen como una forma semi-anónima de represalia.

Y por último los ataques destructivos, y esos son los que más me preocupan.

Esos están en aumento.

El ataque contra Saudi Aramco en 2012, en agosto de 2012.

Afectó a unas 35 000 de sus computadoras con un virus estilo limpiaparabrisas.

Una semana más tarde la continuación en una empresa qatarí.

En marzo de 2013, un ataque en Corea del Sur atribuido en la prensa a Corea del Norte que afectó a miles de computadoras.

Esos están en aumento y vemos gente que expresa interés en esas capacidades y un deseo de emplearlas.

CA: Bueno, un par de cosas aquí, porque esto es realmente el quid, casi.

Digo, en primer lugar, mucha gente que mira el riesgo y mira los números no entiende esta creencia de que el terrorismo sigue siendo la amenaza número uno.

Aparte del 11 de septiembre, creo que los números indican que en los últimos 30 o 40 años unos 500 estadounidenses murieron por terrorismo, en su mayoría a manos de terroristas locales.

La probabilidad en los últimos años de morir por terrorismo es mucho menor que la de morir por un rayo.

Supongo que podrías decirme que un solo incidente nuclear o un acto de bioterrorismo o algo así cambiaría esos números.

¿Sería ese el punto de vista? RL: Bueno, quisiera decir dos cosas.

Una, que la razón por la que no ha habido un ataque importante en EE.UU.

desde el 11-S, no es un accidente.

Se debe al arduo trabajo que hicimos junto a otra gente de la comunidad de inteligencia, que han hecho los militares, y que han hecho nuestros aliados en el mundo.

Habrás oído números, la punta del iceberg en términos de cantidad de ataques terroristas que los programas de la NSA ayudaron a detener, fueron 54, 25 en Europa, y de esos 25, 18 ocurrieron en 3 países, algunos de ellos son aliados, y golpean duramente los programas de la NSA, por cierto.

Así que no es por accidente que ocurren esas cosas.

Es un trabajo arduo.

Hacemos inteligencia sobre actividades terroristas y las impedimos de alguna u otra manera aplicando la ley, cooperando con otros países, y a veces mediante acción militar.

La otra cosa que me gustaría decir es que tu idea de la amenaza nuclear o bioquímica no es en absoluto exagerada y de hecho hay grupos que durante años han expresado interés y deseo de obtener esas capacidades y trabajan para ello.

CA: También se ha dicho que de esos 54 presuntos incidentes pocos o ninguno de ellos tuvieron en realidad que ver con estos programas controvertidos que reveló el Sr.

Snowden, que fue básicamente mediante otras formas de inteligencia, que están buscando una aguja en un pajar, y los efectos de estos programas, estos programas controvertidos, que solo aportan paja a la pila, y no encuentran la aguja.

La aguja fue encontrada por otros métodos.

¿No hay algo de eso? RL: No, en realidad hay 2 programas típicamente implicados en esta discusión.

Una es la Sección 215 del programa de metadatos de telefonía de EE.UU., y el otro es el programa llamado popularmente PRISM, la Sección 702 de la enmienda a la Ley FISA.

Pero el programa 215 solo es pertinente para las amenazas dirigidas contra Estados Unidos, y ha habido una docena de amenazas en las que estuvo implicado.

Verás que la gente dice públicamente que no hay relación de causalidad, no hay un caso para el cual la amenaza se haya cumplido.

Pero eso indica una falta de comprensión de la dinámica de las investigaciones de terrorismo.

Uno piensa en la televisión, ve un asesinato misterioso.

¿Por dónde empieza? Empieza por el cuerpo y partiendo de eso se abren camino para resolver el crimen.

Nosotros partimos mucho antes que eso con suerte antes de que aparezcan los cuerpos, y tratamos de construir el caso de quién es la gente, qué trata de hacer, y eso requiere ingentes cantidades de información.

Piénsalo como un mosaico, es difícil saber si cada pieza del mosaico era necesaria para construirlo, pero para construir la imagen completa, se necesitan todas la información.

De las 54, para las amenazas no vinculadas con EE.UU.

las otras 42, el programa PRISM fue muy relevante y de hecho contribuyó significativamente para detener esos ataques.

CA: Snowden dijo hace 2 días que el terrorismo siempre ha sido lo que en el mundo de la inteligencia se llama «una fachada para la acción», es decir, algo que dado que provoca una respuesta emocional muy fuerte en la gente, permite que estos programas obtengan poderes que una organización como la suya no podría tener de otra manera.

¿Hay algún debate interno acerca de eso? RL: Sí.

Digo, debatimos estas cosas todo el tiempo, y continúa la discusión en el Poder Ejecutivo y dentro de la propia NSA y la comunidad de inteligencia sobre qué es correcto, qué es proporcionado, cuál es la forma correcta.

Y es importante observar que los programas de los que estamos hablando fueron autorizados por 2 presidentes distintos, por 2 partidos políticos distintos, por el Congreso 2 veces, y 16 veces diferentes por jueces federales, así que la NSA no actúa unilateralmente.

Es una actividad legítima del gobierno exterior de Estados Unidos que fue acordada con todos los poderes del gobierno de Estados Unidos, y el presidente Madison estaría orgulloso.

CA: Sin embargo, cuando los congresistas descubrieron lo que se estaba haciendo con esa autorización, muchos de ellos quedaron completamente impactados.

¿O piensas que no es una reacción legítima, que se debe solo a que se hizo público, que sabían exactamente lo que Uds.

estaban haciendo con los poderes que les habían concedido? RL: El Congreso es un gran cuerpo.

Hay 365 integrantes, y cambian con frecuencia, la Cámara de Diputados, cada 2 años, y creo que la NSA brindó la información relevante a nuestras comisiones de vigilancia.

Luego la difusión de esa información de las comisiones de vigilancia a todo el Congreso es algo que manejan ellos.

Me gustaría decir que los miembros del Congreso tuvieron la oportunidad de darse cuenta, y, de hecho, un número significativo de ellos, los que tienen la responsabilidad de vigilancia, tuvieron la posibilidad de hacerlo.

Y realmente los presidentes de esas comisiones lo dijeron en público.

CA : mencionaste la amenaza de ataques cibernéticos, y creo que ninguno de los presentes estaría en desacuerdo de que eso es una gran preocupación, pero aceptas que existe un compromiso entre las estrategias ofensivas y defensivas y que es posible que las mismas medidas adoptadas para «debilitar el cifrado» que te permiten encontrar a los chicos malos, podrían abrir la puerta a formas de ciberataques? RL: Creo dos cosas.

Una es que tú dijiste debilitar el cifrado.

Yo no.

Y la otra cosa es que la NSA tiene las 2 misiones, y estamos muy sesgados hacia la defensa, y, en realidad, las vulnerabilidades que encontramos en la abrumadora mayoría de los casos, es que damos a conocer personas responsables de la fabricación o el desarrollo de estos productos.

Tenemos un gran historial y en este momento estamos trabajando en una propuesta para ser transparentes y publicar reportes de transparencia de la misma manera en que las empresas de Internet se les permite publicar informes de transparencia.

Queremos ser más transparentes en eso.

De nuevo, predicamos con el ejemplo.

Usamos los estándares, usamos los productos que recomendamos, por eso nos interesa mantener las comunicaciones protegidas del mismo modo que lo necesitan las otras personas.

CA: Edward Snowden, cuando, después de su charla, recorrió los pasillos con el bot, escuché que le dijo a un par de personas, que le preguntaron qué pensaba de la NSA en general, fue muy elogioso con las personas que trabajan contigo, dijo que en realidad son un grupo apasionado de empleados que tratan de hacer lo correcto, y que el problema proviene solo de algunas políticas mal concebidas.

Vino ciertamente muy razonable y con calma.

No vino como un loco.

¿Aceptarías, por lo menos, aunque estés en desacuerdo con la forma en que lo hizo, que ha abierto un debate importante? RL: Creo que es una discusión discusión importante.

No me gusta la forma en que la planteó.

Creo que había varias otras maneras de hacerlo sin poner en peligro a nuestra gente y a la gente de otras naciones por la pérdida de visibilidad de lo que hacen los adversarios.

Pero creo que es una conversación importante.

CA: Se ha informado que hay casi una diferencia de opinión entre tus colegas y tú sobre cualquier posibilidad de ofrecerle un acuerdo de amnistía.

Creo que tu jefe, el general Keith Alexander, ha dicho que sería un pésimo ejemplo para otros; que no se puede negociar con alguien que quebrantó la ley de ese modo.

Pero tú has sido citado diciendo que, si Snowden pudiera probar que entregó todos los documentos no divulgados, que debería considerarse un acuerdo.

¿Sigues pensando eso? RL: Sí, en realidad, es mi parte favorita de esa entrevista de «60 Minutos», y todas las citas erróneas que salieron de allí.

Lo que en realidad dije, en respuesta a una pregunta sobre si estaría abierto a la discusión de mitigar la acción contra Snowden, dije que sí, que valdría la pena conversar.

Esto es algo de lo que el fiscal general de Estados Unidos y también el presidente ambos han hablado de esto, y me remito al fiscal general, porque ese es su competencia.

Pero hay una fuerte tradición en la jurisprudencia estadounidense de tener conversaciones con personas acusadas ​​de delitos para, de ser beneficioso para el gobierno, obtener algo a cambio.

Siempre hay lugar para ese tipo de discusión.

No estoy presuponiendo ningún resultado, pero siempre hay lugar para la discusión.

CA: Para el lego que parece ser tiene ciertas cosas que ofrecer a EE.UU., al gobierno, a ti, a otros, en términos de acomodar las cosas y ayudar a encontrar una política más inteligente, una forma más inteligente de avanzar hacia el futuro.

¿Ves algún tipo de posibilidad de acercamiento? RL: Eso está fuera de mi ámbito.

No es algo de la NSA.

Esa sería una discusión del Departamento de Justicia.

Se lo dejaré a ellos.

CA: Rick, cuando Ed Snowden terminó su charla, le ofrecí la posibilidad de compartir una idea que vale la pena difundir.

¿Cuál sería tu idea que vale la pena difundir para este grupo? RL: Creo que es conocer los hechos.

Esta es una conversación realmente importante, tiene impacto, no solo en la NSA, no solo en el gobierno, en Uds., en las empresas de Internet.

El tema de la privacidad y de los datos personales es mucho más grande que solo el gobierno, por eso conozcan los hechos.

No confíen en los titulares, no confíen en altisonancias, no confíen en conversaciones unidireccionales.

Esa es la idea, creo, que vale la pena difundir.

Tenemos un signo, una insignia, en el trabajo llevamos insignias, y si puedo hacer publicidad, mi insignia laboral dice «Dallas Cowboys».

Vamos Dallas.

Acabo de enajenar a media audiencia, lo sé.

La insignia de nuestra gente que trabaja en la organización en tareas de cripto-análisis tiene una pestaña que dice: «Mira a los datos».

Esa es la idea que vale la pena difundir.

Miren los datos.

CA: Rick, se requiere cierto coraje, creo, para salir a hablar abiertamente a este grupo.

No es algo que la NSA haya hecho mucho en el pasado, y además de la tecnología ha sido un reto.

Te agradecemos que hayas participado en esta conversación muy importante.

Muchas gracias.

RL: Gracias, Chris.

(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/richard_ledgett_the_nsa_responds_to_edward_snowden_s_ted_talk/

 

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