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Los beneficios de las payasadas para la salud – Charla TED Residency

Charla «Los beneficios de las payasadas para la salud» de TED Residency en español.

Como payaso médico, el residente de TED Mathew A. Wilson se toma muy en serio el viejo dicho de que la risa es la mejor medicina. En esta charla conmovedora, comparte retazos de cómo las payasadas pueden ayudar a los pacientes y al personal médico a navegar por situaciones estresantes, sin efectos secundarios.

  • Autor/a de la charla: Matthew A. Wilson
  • Fecha de grabación: 2019-05-14
  • Fecha de publicación: 2020-02-04
  • Duración de «Los beneficios de las payasadas para la salud»: 448 segundos

 

Traducción de «Los beneficios de las payasadas para la salud» en español.

Bailé con Bella por primera vez mientras Bei Mir Bits Du Schön llenaba la habitación.

Sus ojos azules se encontraron con los míos Nos turnamos para cantar y olvidar las palabras.

Ella guio, yo la seguí.

Un paso de vals aquí, un contoneo allá.

(Sonido de maracas)
(Risas)
Manos sobre nuestros corazones nuestras frentes tocándose nos comunicamos a través de movimientos y música creando sentido del sinsentido.

Bella tiene 83 años y vive con demencia.

El baile nos da la oportunidad de encontrarnos.

¿Cómo aprendí a bailar con demencia?

Porque no soy un bailarín Y no soy médico.

Pero interpreto a uno en el hospital.


(Risas)
Soy médico payaso.

O payaso médico.

Mis herramientas son cojines de ventosidades, cascabeles, (Cascabel agitándose) y una nariz roja.

¿Conocen el viejo dicho: «la risa es la mejor medicina»?

Escucho eso un montón.

Al mismo tiempo, hay estudios que lo respaldan, pero ahora mismo, me gustaría llevarlos detrás de la nariz y más allá de la risa y compartir cosas que vi pasando por unidades de cuidados intensivos.

En mis zapatones.

Talla 11.

Porque me tomo las payasadas médicas muy, muy en serio.

(Sonido de pedorreta)
(Risas)
(Sonido de pedorreta) (Sonido de pedorreta)
(Risas)
Mi mentor llevaba a cabo rondas de payasos en el hospital cuando lo abordó una enfermera.

Tenía que intubar a un niño por la nariz.

El niño no quería, así que, en lugar de sujetarlo, le pidieron a mi colega que si podía ayudar.

Así que el payaso pidió un segundo tubo y se lo metió en la nariz.

De esta manera.

Y por favor, no hagan esto en casa.


(Risas)
Bien, el niño vio esto, agarró su propio tubo y rápidamente se lo metió por la nariz, de esta manera.


(Aplausos)
Los payasos, la enfermera y el paciente descubrieron juntos una solución creativa para su situación.

Y adivinen qué, hay evidencia científica que lo respalda.

Ensayos controlados aleatorios en Israel y en Italia mostraron que los payasos pueden ser tan efectivos como los tranquilizantes, pero sin efectos secundarios.

En 2004 comencé a realizar mis propias rondas de payaso en el Centro de Cáncer Memorial Sloan Kettering en Nueva York.

A mi colega y a mí nos invitaron a acompañar a un joven de 6 años con el acento sureño más adorable mientras se purgaba su puerto de quimioterapia, un procedimiento muy incómodo y habitual.

Nos unimos a él, a su madre y a su enfermera en este cubículo pequeño, cerrado con cortinas.

Cada encuentro con payasos médicos empieza con el consentimiento del paciente.

Así que le preguntamos si podíamos estar allí.

Él dijo: «Claro».

A menudo somos lo único que un niño puede controlar mientras está en el hospital.

Empezamos con un truco de cartas, extendí la baraja para que pudiera elegir.

Pero cuando la enfermera se acercó con la aguja para limpiar el puerto, comenzó a gritar y maldecir como no había oído jamás a ningún niño de 6 años.

Entonces dijimos: «

¿Volvemos más tarde?

«.

Él para, con la boca abierta, ojos húmedos con lágrimas, cara roja por la ira, y sonríe: «No, está bien, quiero que se queden aquí».

De acuerdo.

Empezamos a tocar una canción.

mi colega con la flauta, yo con el cojín de ventosidades.

La enfermera se acerca con la aguja, y ocurre de nuevo, este torrente de palabras malsonantes.

Él pasa de jugar y reír a gritar y llorar, ida y vuelta hasta completar el procedimiento.

Por primera vez, experimenté una extraña dualidad entre alegría y sufrimiento.

Pero no por última vez.

Cuando estamos allí, no estamos solo para distraer o hacer que alguien se sienta mejor.

Los payasos médicos trabajan en cada momento para crear conexiones entre los payasos, la enfermera, los padres y el niño.

Esto proporciona una fuente de poder y control al niño mientras apoya al personal con su trabajo.

He pasado más de una década trayendo alegría y deleite a las camas de niños con enfermedades terminales en los mejores hospitales de Nueva York

¿Y saben qué he aprendido?

Todos están sufriendo.

Personal, familia, pacientes.

Los pacientes en el hospital porque están sufriendo.

La familia sufre mientras navega por la incertidumbre, dolor y la carga financiera del tratamiento.

El personal sufre, pero más de agotamiento.

Más y más profesionales de la salud denuncian sentirse sobrecargados y extenuados.

No soy tan ingenuo como para sugerir que la solución sea enviar payasos.


(Risas)
Pero

¿y si…?

¿Y si las herramientas de los practicantes de payasos médicos del mundo impregnaran todo nuestro sistema de salud?

En 2018 en el Encuentro internacional de Payasos Médicos, había más de 150 programas en 50 países diferentes.

La universidad de Haifa ofrece un programa formal de licenciatura en payaso médico.

Argentina ha aprobado leyes que requieren la presencia de payasos médicos en hospitales públicos de sus provincias más grandes.

Y este trabajo afecta más que los pacientes Mejora las cosas para todo el equipo médico.

Uno de mis juegos favoritos en el hospital es la música de ascensor.

Me encantan los ascensores, porque son un lugar donde se cruzan caminos, se encuentran diferentes mundos.

Es íntimo, incómodamente tranquilo y solo ruegas por un poco de interrupción juguetona.

Las puertas se cierran y «The Girl from Ipanema» empieza a sonar en el órgano Hammond porque guardo un altavoz portátil escondido en mi bolsillo.

Para aquellos acostumbrados a usar el ascensor silencioso y estéril es un momento de sorpresa.

La gente tiene permiso para aceptar o no esta interrupción.

El juego crece con cada parada, porque tan pronto como el ascensor se detiene, la música para.

Nuevos pasajeros se suben y los actuales pasajeros pueden presenciar a los nuevos pasajeros, su sorpresa, ya que escuchan la música de ascensor por primera vez.

Experimentas el cambio de adultos de pie en silencio, extraños en un ascensor intentando reprimir su alegría, a «

¿Es una fiesta o un ascensor?

«, llena de carcajadas.

Una investigación realizada en Brasil, Australia, Canadá y Alemania confirma que las intervenciones artísticas de payasos médicos mejoran el ambiente laboral para el personal, más allá del ascensor, y apoyan su trabajo gestionando el cuidado.

Una prometedora investigación en EE.

UU.

sugiere que incorporar arte en el hospital puede mejorar el ambiente de trabajo dando mayor satisfacción laboral y una mejor calidad en la atención.

Mi trabajo me ha enseñado cómo estar de verdad en el presente.

Cómo respirar en una habitación con una persona con dolor.

Cómo conectar construir confianza, no importa la edad, capacidad o enfermedad.

Y cómo el payaso médico es una excelente forma de usar el arte para devolver la atención a la atención médica.

Gracias.


(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/matthew_a_wilson_the_health_benefits_of_clowning_around/

 

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