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Los dictadores odian las caricaturas políticas. Por eso las sigo dibujando. – Charla TEDWomen 2019

Charla «Los dictadores odian las caricaturas políticas. Por eso las sigo dibujando.» de TEDWomen 2019 en español.

«Una caricatura política es un barómetro para medir la libertad», dice Rayma Suprani, quien fue exiliada de su tierra natal de Venezuela por publicar caricaturas que criticaban al gobierno. «Es por eso que los dictadores odian a los caricaturistas». En una charla ilustrada con caricaturas destacadas de una carrera caracterizada por criticar el totalitarismo, Suprani explora cómo las caricaturas reflejan una sociedad y revelan las verdades ocultas, y cuenta por qué sigue dibujándolas aun a un alto costo personal».
(En español con interpretación consecutiva en inglés)

  • Autor/a de la charla: Rayma Suprani
  • Fecha de grabación: 2019-12-04
  • Fecha de publicación: 2020-01-31
  • Duración de «Los dictadores odian las caricaturas políticas. Por eso las sigo dibujando.»: 1002 segundos

 

Traducción de «Los dictadores odian las caricaturas políticas. Por eso las sigo dibujando.» en español.

[Esta charla se presentó en español con interpretación consecutiva en inglés.] Rayma Suprani: Cuando era niña, dibujaba en todas las paredes de mi casa.

(Cloe Shasha: En inglés) RS: Hasta que un día mi madre, enojada, me dijo: «Puedes elegir una pared.

Pero no puedes rayar las demás paredes de la casa.» (CS: En inglés)
(Risas)
Allí sentí mi primer acto de censura totalitaria.

(En inglés)
(Risas)
Pero la falta de libertad estimula la creatividad y la repotencia al infinito.

(En inglés) Ya han pasado muchos años de eso.

Pasé por mis estudios formales, siempre dibujando en clase.

Llegué a la universidad, estudié periodismo para ampliar mi necesidad de comunicación en la escritura y en el habla.

Pero lo único que me conecta y me apasiona con la vida es poder dibujarla.

(En inglés) Yo nací en democracia en un país llamado Venezuela, que actualmente es una dictadura.

(En inglés) Dibujé durante 19 años una caricatura diaria en uno de los mayores periódicos de Venezuela.

Me gustaba traducir el acontecer diario en dibujos, tanto políticos como sociales.

(En inglés) En el año 2014, me despidieron de mi trabajo por una caricatura que se publicó, alusiva a la salud en Venezuela, y en donde se utilizaba la firma de Chávez, como ícono principal.

(En inglés)
(Risas)
Todo esto ocurrió después de que el periódico fue comprado por un consorcio fantasma, el cual algunos de nosotros piensa que fue el gobierno.

(En inglés) Mi trabajo de caricatura se volvió muy molesto para la dictadura.

Ellos no soportan la libertad de expresión ni el pensamiento libre.

(En inglés) Después de mi despido, empecé a sentirme en peligro en mi propio país.

Llamadas anónimas, amenazas de muerte y sometimiento al escarnio público en el canal de televisión del Estado me obligaron a salir de Venezuela.

Y actualmente vivo en la ciudad de Miami y soy mi propia editora en la web.

(En inglés) La caricatura es el termómetro de las libertades de un país.

Por eso, los dictadores odian a los caricaturistas y tratan de erradicar de su espacio todo lo que tenga que ver con el humor como espejo social.

(En inglés) La caricatura es un juego de ideas que se combinan con dibujos y que da como resultado la revelación de algo oculto.

(En inglés) La caricatura buena es la que cuenta toda la película en un solo cuadro.

(En inglés) La caricatura debe apuntar al centro de la diana para expresar su potencial visual, su poder en el mensaje.

Así, como su efecto en aplicar una dosis de cuestionamiento libre a cada uno de los lectores.

(En inglés) La caricatura se nutre de la observación y el análisis.

Se inspira con musas de la antigüedad, modelos clásicos y modernos, en algunos casos paleolíticos, y demuestran que en la más moderna pasarela del mundo, todo emperador siempre está desnudo.

(En inglés)
(Risas)
(En inglés) En un tiempo empecé a dibujar muchos cerdos como serie de trabajo.

Los comparaba con los políticos y los guardias nacionales que reprimían las manifestaciones pacificas de los estudiantes.

Un día, al llegar a mi oficina en el periódico, conseguí una carta en mi mesa de trabajo (En inglés) Era una carta de la Federación Venezolana de Porcicultura.

(En inglés)
(Risas)
La carta decía que por favor no comparara a un animal tan maravilloso como el cerdo …


(Risas)
con los políticos, ya que el cerdo es un animal muy amigable, simpático, noble, que puede llegar a ser una buena mascota y del cual se pueden alimentar a muchos aprovechando absolutamente toda su generosidad.

(En inglés)
(Risas)
(En inglés) Pienso que tenían toda la razón.

No dibujé más cerdos, pero sí muchos más políticos.

(En inglés)
(Risas)
Actualmente, la caricatura viaja por la autopista de la información, la cual aparenta tener múltiples canales, pero todos están regidos por la inmediatez y el cálculo binario.

«Me gusta,» «No me gusta,» son las únicas opciones que en la actualidad gobiernan el pensamiento democrático de la web.

(En inglés) Hemos perdido el gran espacio de crear argumentos.

No tenemos tiempo, simplemente actuamos a favor y en contra de unos y otros solo para favorecer un algoritmo.

(En inglés) La caricatura nace de un espacio de pensamiento plural.

Por eso, el caricaturista debe despojarse de sus propios tabúes para dibujar y producir un verdadero aporte gráfico.

La caricatura es un espacio para generar diálogos, no confrontación.

(En inglés) En el año 2013, murió el Presidente Chávez.

A mí me tocaba dibujar la caricatura del día siguiente, que se publicaría en el periódico.

Yo estaba muy feliz por esa muerte.

Pensaba que daría libertad a nuestro país y que los tiempos que vendrían serían más fáciles para todos.

(En inglés) Pero había mucha gente que lloraba la muerte de Chávez.

Había un ambiente de país dividido.

Unos celebraban y otros lloraban a su líder.

(En inglés) Yo no sabía qué dibujar.

Era un momento histórico; no podía permitir que mi felicidad se filtrara en mi trabajo.

Debía elevar el mensaje y respetar el duelo, sin dejar de decir y hacer mi trabajo.

¿Qué podía dibujar?

(En inglés) Pasé muchas horas dibujando y botando papeles.

Mi editor me llamaba; todo estaba retrasado en las páginas del periódico.

Pero en un instante en la noche, llegó la idea.

Y allí fue cuando publiqué esta caricatura que tradujo el acontecer de una sociedad.

(En inglés) Un rey de ajedrez rojo caído.

(En inglés) La caricatura es potente en sus resultados; puede generar acción y reacción.

Es por eso que se debe ejercer con absoluta responsabilidad pero sin miedos a las consecuencias.

(En inglés) La opinión tiene un precio en algunos países, y es muy alto.

(En inglés) En Venezuela, hay muchos jóvenes que han sido asesinados por protestar pacíficamente.

También hay hombres y mujeres presos políticos.

Yo he tratado de dibujar los rostros de muchas mujeres que han estado presas para que no sean olvidadas por su comunidad.

(En inglés) Este año, en un evento del Foro Penal, una agrupación de abogados que asiste gratuitamente a los presos políticos en Venezuela, se me acercó una muchacha y me dijo: «Yo estuve presa, y tú me dibujaste.

Dibujaste mi historia, y mucha gente supo quien era yo.

Y eso me ayudo mucho a sobrellevar los días de cárcel.

Muchas gracias.» (En inglés) Esto es algo que me agradó mucho.

Descubrí una capacidad para colaborar con la memoria de mi país y de su gente.

(En inglés) El año pasado empecé a dibujar sobre el tema de la inmigración.

Dibujaba mi propio mundo: mis miedos, mi maleta, mi duelo por la pérdida el arraigo, todo lo que me tocó dejar atrás de mí misma y de mi país, también, la alegría frente a esta nueva oportunidad como inmigrante en los Estados Unidos.

(En inglés) De allí salió una serie de dibujos temáticos que recrean la psicología de la inmigración.

(En inglés) Ser inmigrante es como llegar a otro planeta.

Inicialmente, no entiendes nada del nuevo mundo que te rodea.

Nuevos códigos, nuevo idioma, hasta necesitas mecanismos artificiales para adoptarte a esta nueva vida.

(En inglés) Ser inmigrante es lo más parecido ser un astronauta que aterriza en la luna.

(En inglés) Con el tiempo, esos dibujos se volvieron una exposición itinerante llamada, «Yo, inmigrante.» Y esa exposición ya ha viajado a varias ciudades como Miami, Houston, Madrid, Barcelona, y esperamos llevarla a muchas otras ciudades.

(En inglés) Ha generado una zona de encuentro para la diáspora y de reconocimiento en la emocionalidad que sufrimos todos los inmigrantes.

(En inglés) Mi caricatura pretende alertar sobre los significados.

Un inmigrante no es un criminal.

Un inmigrante es una persona quebrada, y por lo general, una familia que ha sido obligada a separarse bajo condiciones inhumanas y obligada a marcharse de su país en busca de mejores condiciones de vida.

(En inglés) Un dibujo puede ser la síntesis del universo, de un país, de una sociedad, o de la manera de pensar de un individuo.

Dibujar caricaturas es para mí una forma de resistencia.

(En inglés) La caricatura es una piedra de Rosetta, que si la lanzamos al espacio nos dará dentro de algunos años la certeza de que en este planeta sí existió el pensamiento libre y el mundo civilizado.

(En inglés) Es por eso que la pared que me regaló mi madre es infinita, y aún la sigo dibujando.

(En inglés) Thank you very much.


(Aplausos)

https://www.ted.com/talks/rayma_suprani_dictators_hate_political_cartoons_so_i_keep_drawing_them/

 

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