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Charla «Para más maravillas, «resalvajicemos» el mundo» de TEDGlobal 2013 en español.
Los lobos fueron una vez habitantes naturales del Parque Nacional Yellowstone en los Estados Unidos, hasta que la caza los aniquiló. Pero cuando, en 1995, los lobos empezaron a regresar (gracias a un agresivo programa de gestión), sucedió algo interesante: el resto del parque comenzó a encontrar un nuevo equilibrio, más saludable. En un experimento mental audaz, George Monbiot se imagina un mundo salvaje en el que los seres humanos trabajan para restaurar las complejas cadenas alimentarias naturales perdidas que una vez nos rodearon.
- Autor/a de la charla: George Monbiot
- Fecha de grabación: 2013-07-08
- Fecha de publicación: 2013-09-09
- Duración de «Para más maravillas, «resalvajicemos» el mundo»: 910 segundos
Traducción de «Para más maravillas, «resalvajicemos» el mundo» en español.
Cuando era joven, pasé seis años de aventuras salvajes en los trópicos trabajando como periodista investigador en algunos de los lugares más fascinantes del mundo.
Era tan imprudente e insensato, como solo los jóvenes pueden ser.
Por eso se inician las guerras.
Pero también me sentí más vivo que nunca.
Y cuando llegué a casa, sentí que el alcance de mi existencia disminuía gradualmente hasta parecerme que llenar el lavavajillas era un reto interesante.
Me sentía como arañando las paredes de la vida, como si intentara encontrar una salida a un espacio mayor, más allá.
Era, creo, ecológicamente aburrido.
Hemos evolucionado de épocas más difíciles que éstas, en un mundo de garras, cuernos y colmillos.
Y contamos todavía con el temor y el coraje y la agresividad necesaria para navegar en aquellos tiempos.
Pero en nuestras tierras cómodas, seguras y llenas de gente, tenemos pocas oportunidades de ejercitarlas sin dañar a otras personas.
Este era el tipo de restricción ante la que me encontré expuesto.
Conquistar la incertidumbre, saber qué viene después, casi ha sido el objetivo dominante de las sociedades industrializadas, y habiendo llegado ahí o casi habiéndolo conseguido, tenemos un nuevo grupo de necesidades insatisfechas.
Hemos priorizado la seguridad sobre la experiencia y hemos ganado mucho al hacerlo, pero creo que también hemos perdido algo.
No romantizo el tiempo evolutivo.
Ya he sobrepasado el ciclo de vida de la mayoría cazadores-recolectores, y el resultado de un combate mortal entre yo, tambaleándome con una lanza con punta de piedra y un uro enorme enfurecido, no es muy difícil de predecir.
Tampoco era autenticidad lo que buscaba.
No lo encuentro un concepto útil ni incluso inteligible.
Quería solo una vida más rica y más cruda de la que podía tener en Gran Bretaña o, incluso, de la que podemos llevar en la mayor parte del mundo industrializado.
Y fue solo al toparme con una palabra desconocida que empecé a comprender lo que buscaba.
Y en cuanto encontré esa palabra, me di cuenta de que quería dedicar gran parte del resto de mi vida a ello.
La palabra es «resalvajización», y aunque resalvajización es una palabra joven, ya tiene varias definiciones.
Pero hay dos en particular que me fascinan.
La primera es la restauración masiva de los ecosistemas.
Uno de los hallazgos científicos más emocionantes del último medio siglo ha sido el descubrimiento de las cascadas tróficas generalizadas.
Una cascada trófica es un proceso ecológico que comienza arriba de la cadena alimentaria y cae todo el camino hasta la parte inferior, y el ejemplo clásico fue lo que pasó en el Parque Nacional de Yellowstone en EE.
UU.
cuando fueron reintroducidos los lobos en 1995.
Todos sabemos que los lobos matan varias especies de animales, pero tal vez seamos menos conscientes de que dan vida a muchos otros.
Suena raro, pero solo tienen que seguirme un momento.
Antes de que los lobos reaparecieran, estuvieron ausentes por 70 años.
El número de ciervos, dado que nadie los cazaba, había aumentado y aumentado en el parque de Yellowstone, y a pesar de los esfuerzos de los seres humanos por controlarlos, lograron reducir gran parte de la vegetación hasta casi nada, simplemente se la habían comido.
Pero tan pronto como llegaron los lobos, aunque eran pocos en número, empezaron a tener los efectos más notables.
Primero, por supuesto, mataron algunos ciervos, Pero eso no fue lo importante.
Más significativamente, cambiaron radicalmente el comportamiento de los ciervos.
Los ciervos comenzaron a evitar ciertas partes del parque, los lugares donde podrían ser atrapados más fácilmente, particularmente los valles y los cañones, y esos lugares empezaron inmediatamente a regenerarse.
En algunas zonas, la altura de los árboles se quintuplicó en tan solo seis años.
Las partes peladas del valle se convirtieron rápidamente en bosques de álamos y sauces.
Y tan pronto como eso pasó, las aves empezaron a ocuparlos.
El número de aves cantoras y migratorias, comenzó a aumentar considerablemente.
El número de castores comenzó a aumentar, porque a los castores les gusta comer árboles.
Y los castores, como los lobos, son ingenieros de ecosistemas.
Crean nichos para otras especies.
Y construyeron las presas en los ríos proporcionando hábitats para nutrias y ratas almizcleras y patos y peces y reptiles y anfibios.
Los lobos mataron coyotes, y como resultado, el número de conejos y ratones comenzó a aumentar, lo que significó más comadrejas, más halcones, más zorros, más tejones.
Los cuervos y águilas calvas bajaron a alimentarse de la carroña que habían dejado los lobos.
Los osos se alimentaron también, y su población comenzó a aumentar, en parte también porque hubo más bayas creciendo en los arbustos regenerados, y los osos reforzaron el impacto de los lobos matando a algunos de los terneros de los ciervos.
Pero aquí es donde se pone realmente interesante.
Los lobos cambiaron el comportamiento de los ríos.
Comenzaron a serpentear menos.
Hubo menos erosión.
Los canales se estrecharon.
Se formaron más pozos, más tramos de rápidos, que fueron todos estupendos para hábitats salvajes.
Los ríos cambiaron en respuesta a los lobos, y la razón fue que la regeneración de los bosques estabilizó los bancos para que se derrumbaran menos veces y así los ríos tuvieron rutas más estables en su curso.
Asimismo, al sacar a los ciervos de algunos lugares y recuperar la vegetación en los lados del valle, hubo menos erosión del suelo, porque la vegetación se estabilizó también.
Así que los lobos, pequeños en número, transformaron no solo el ecosistema del Parque Nacional Yellowstone, esta gran área de tierra, sino también su geografía física.
Las ballenas en los océanos del sur tienen igualmente efectos amplios.
Una de las muchas excusas postracionales dada por el gobierno japonés para la cacería de ballenas es que dicen, «Bueno, el número de peces y krill aumentará y entonces habrá más para que coman las personas».
Bueno, es una excusa tonta, pero más o menos tiene sentido, no es así, porque uno creería que las ballenas comen grandes cantidades de pescado y krill, y que obviamente al sacar las ballenas, habrá más pescado y krill.
Pero sucedió lo contrario.
Al sacar las ballenas de ahí el número de krill colapsa.
¿Por qué posiblemente pasa esto? Bueno, resulta que las ballenas son cruciales para el sostenimiento de todo ese ecosistema, y una de las razones para esto es que a menudo se alimentan en profundidad y luego suben a la superficie y producen lo que los biólogos llaman educadamente grandes penachos fecales, enormes explosiones de caca cruzando las aguas superficiales, arriba en la zona fótica, donde hay suficiente luz para permitir que se produzca la fotosíntesis, y esos grandes penachos de fertilizante estimulan el crecimiento del fitoplancton, el plancton vegetal en la base de la cadena alimentaria, que estimula el crecimiento de zooplancton, que alimenta a los peces y al krill y a todo el resto.
Otra cosa que las ballenas hacen es que, como están saltando hacia arriba y hacia abajo por la columna de agua, están golpeando el fitoplancton que sube a la superficie donde puede continuar sobreviviendo y reproduciéndose.
Y curiosamente, sabemos que el plancton vegetal de los océanos absorbe carbono de la atmósfera —cuanto más plancton vegetal haya, mayor cantidad de carbono absorbe— y finalmente filtra hacia abajo hacia el abismo y elimina ese carbono del sistema atmosférico.
Bueno, parece que cuando las ballenas estaban en sus poblaciones históricas, probablemente fueron responsables del secuestro de algunas decenas de millones de toneladas de carbono cada año de la atmósfera.
Y al verlo así, piensas, espera un minuto, aquí están los lobos cambiando la geografía física del Parque Nacional de Yellowstone.
Aquí están las ballenas cambiando la composición de la atmósfera.
Empiezas a ver que posiblemente, las pruebas que apoyan la hipótesis de Gaia de James Lovelock, que concibe el mundo como un coherente organismo autorregulador, están comenzando, a nivel de ecosistema, a acumularse.
Las cascadas tróficas nos dicen que el mundo natural es aún más fascinante y complejo de lo que creíamos que era.
Nos dicen que cuando quitas los grandes animales, te quedas con un ecosistema radicalmente diferente a uno que conserva sus grandes animales.
Y constituyen, en mi opinión, un fuerte argumento para la reintroducción de especies desaparecidas.
Resalvajización, para mí, significa traer de vuelta algunas de las plantas y animales desaparecidos.
Significa derribar las vallas, significa bloquear las zanjas de drenaje, significa impedir la pesca comercial en algunas áreas grandes del mar, y sino dar un paso atrás.
No tiene visión de cómo es un ecosistema correcto o de cómo es un correcto ensamblaje de especies.
No intenta producir un brezo o un prado o un bosque o un jardín de algas o un arrecife de coral.
Permite a la naturaleza decidir, y la naturaleza, por lo general, decide bastante bien.
He mencionado que existen dos definiciones de resalvajización que me interesan.
La otra es la resalvajización de la vida humana.
Y no lo veo como una alternativa a la civilización.
Creo que podemos disfrutar de los beneficios de la tecnología avanzada, como hacemos ahora, pero al mismo tiempo, si lo elegimos, tener acceso a una vida más rica y más salvaje de aventura cuando queramos porque habría maravillosos hábitats resalvajizados.
Y las oportunidades para esto que se están desarrollando más rápidamente de lo Uds.
creen posible.
Una estimación sugiere que en los EE.
UU., 2/3 partes de la tierra que estaba cubierta de bosques una vez y luego fue despejada se ha reforestado tan pronto leñadores y agricultores se han retirado, particularmente desde la mitad oriental del país.
Hay otro que sugiere que 30 millones de hectáreas de tierra en Europa, un área del tamaño de Polonia, va ser desocupado por los agricultores entre 2000 y 2030.
Ahora, ante oportunidades como esta, ¿no parece poco ambicioso pensar solamente en traer de vuelta lobos, linces, osos, castores, bisontes, jabalíes, alces, y todas las otras especies que ya están empezando a moverse rápidamente por toda Europa? Quizás también deberíamos empezar a pensar en el retorno de parte de nuestra megafauna perdida.
¿Qué megafauna, me preguntarán? Bueno, todos los continentes tuvieron la suya, salvo la Antártida.
Cuando fue excavada Trafalgar Square en Londres, las gravas del río allí, se encontró que estaban llenas de huesos de hipopótamos, rinocerontes, elefantes, hienas, leones.
Sí, señoras y señores, había leones en Trafalgar Square mucho antes de que fuera construida la columna de Nelson Todas estas especies vivieron aquí en el último período interglacial, cuando las temperaturas eran muy similares a las nuestras.
No es el clima, de lejos, por lo que se perdieron las megafaunas del mundo.
Fue la presión de la población humana la caza y la destrucción de sus hábitats las que lo hicieron.
Y aun así, todavía se pueden ver las sombras de estas grandes bestias en nuestros ecosistemas actuales.
¿Por qué tantos árboles de hoja caduca son capaces de brotar desde cualquier punto del tronco cuando este está roto? ¿Por qué pueden soportar la pérdida de tanta corteza? ¿Por qué árboles de sotobosque que estén sujetos a menores fuerzas del viento y tienen que llevar menos peso que los grandes árboles, son mucho más duros y más difícil de romper que el dosel de los árboles? Los elefantes.
Están adaptados al elefante.
En Europa, por ejemplo, evolucionaron para resistir el colmillo recto del elefante, elephas antiquus, que era una gran bestia.
Estaba relacionado con el elefante asiático, pero era un animal templado, una criatura del bosque templado.
Era mucho más grande que el elefante asiático.
Pero ¿por qué es que algunos de nuestros arbustos comunes tienen espinas que parecen ser sobre diseñadas para resistir ser comidas por los ciervos? Tal vez porque evolucionaron para resistir a ser comidas por el rinoceronte.
¿No es un pensamiento asombroso que cada vez uno se desvía en un parque o por una avenida o a través de una calle arbolada, puede ver las sombras de estas grandes bestias? Paleoecología, el estudio de los ecosistemas antiguos, crucial para la comprensión de nosotros mismos, se siente como un portal a través del cual se puede pasar a un reino encantado.
Y si estamos en realidad buscando áreas de tierra del tamaño de las que he hablado que están siendo habilitadas, ¿por qué no reintroducir parte de nuestra megafauna perdida, o por lo menos especies estrechamente relacionadas con las que se han extinguido? ¿Por qué no tener todos nosotros un Serengeti a nuestras puertas? Y tal vez esto es lo más importante la resalvajización nos ofrece, la cosa más importante que falta en nuestras vidas: esperanza.
Para motivar a las personas a amar y defender el mundo natural, una pizca de esperanza vale tanto como una tonelada de desesperación.
La historia de la resalvajización nos dice que un cambio ecológico no siempre debe desarrollarse en una sola dirección.
Nos ofrece la esperanza de que nuestra primavera silenciosa podría ser sustituida por un verano estridente.
Gracias.
(Aplausos)
https://www.ted.com/talks/george_monbiot_for_more_wonder_rewild_the_world/