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«Primer Beso» por Tim Seibles – Charla TED-Ed

Charla ««Primer Beso» por Tim Seibles» de TED-Ed en español.

Esta animación es parte de nuestra nueva serie, «Hay un poema para eso», que presenta interpretaciones animadas de poemas, tanto viejos y nuevos que le dan al idioma algo de los más grandes sentimientos de la vida.

Poema por Tim Seibles, dirigido por Hannah Jacobs.

  • Autor/a de la charla: Tim Seibles
  • Fecha de grabación: 2019-04-01
  • Fecha de publicación: 2019-04-01
  • Duración de «»Primer Beso» por Tim Seibles»: 148 segundos

 

Traducción de «»Primer Beso» por Tim Seibles» en español.

Primer Beso Su boca cayó en mi boca como la nieve de verano, como la 5.ª estación, como el fresco Edén, como el Edén cuando Eva hizo a Dios lloriquear con el líquido inclinado de sus caderas, —su beso lastima así— quiero decir, fue como si mezclara el sudor de un ángel con el sabor de una mandarina, lo juro, mi boca había tenido un yelmo siempre engrasado con secretos, mi boca, un callejón sin salida un poco así iluminada por dientes, mi corazón, almeja, cerrada de un golpe en la oscuridad, pero su boca se detuvo como un azul cielo Cadillac repleto de canarios llevados por un tucán, lo juro, sus labios decían alas luminosas cuando nos besamos, salvaje y precisa, como si estuviera enseñando a un caballo del mar a hablar, su boca tan cuidadosa, haciendo amistad con la primera vocal de mi garganta hasta que mi cerebro fue un piano golpeado fuerte, martillado así —fue como, juro que su lengua fue la séptima luna de Saturno— así de cálida, cálida y fría y dando vueltas, dando vueltas, me hace girar a un planeta de felicidad, el Sol, por un lado, la noche se vierte su lenta mano sobre la otra: fuego volando la cometa de otro.

Su beso, lo juro, si la Gran Madre se precipitó para abrir la Luna como un regalo y estabas allí para sentir tu sombra finalmente descolgado de tu muñeca.

Eso sería, pero incluso más dulce como un disturbio de sacerdotes con patas de palo en un pogo saltarín, que sube más, de esta manera y así, sin caer, pero sin parar justo así, mal portados pero sagrado, ¡lo juro!, ese beso: los dos labios totalmente entregados al mundo como el Cuerpo de Paz, como un almacén gratis, para siempre y por siempre una nueva ciudad, sin cerraduras, paredes, solo puertas, como eso, lo juro, como eso.

https://www.ted.com/talks/tim_seibles_first_kiss/

 

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