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Charla «¿Qué tal si rastreamos el metano desde el espacio y frenamos el cambio climático?» de TED2018 en español.
Cuando se habla de gases naturales, el dióxido de carbono es el que recibe mayor atención. Sin embargo, el metano también es responsable de un cuarto del calentamiento global que estamos observando hoy.
Las industrias de petróleo y gas son las principales fuentes de emisión de metano y, cuando este gas invisible escapa de sus tanques y tuberías, no solo pierden ganancias. Fred Krupp, miembro del Fondo para la Defensa del Medio Ambiente, tiene una idea: rastrear la emisión mundial de metano con una increíble precisión, usando un satélite llamado MethaneSAT. Además, planea entregar a los gobiernos, corporaciones y al público en general los datos necesarios para actuar. Este plan ambicioso es una de las primeras ideas de The Audicious Project, la nueva iniciativa de TED para inspirar cambios a una escala global.
- Autor/a de la charla: Fred Krupp
- Fecha de grabación: 2018-04-10
- Fecha de publicación: 2018-04-13
- Duración de «¿Qué tal si rastreamos el metano desde el espacio y frenamos el cambio climático?»: 513 segundos
Traducción de «¿Qué tal si rastreamos el metano desde el espacio y frenamos el cambio climático?» en español.
Tenemos un gran problema entre manos con el calentamiento global.
Muchos de nosotros, muchas personas han visto inundaciones, sequías, tormentas e incendios.
Cuando me retire de este estrado hoy, no quiero que tengan esperanza; quiero que tengan certeza, una certeza real de que podemos revertir este problema y vivir para verlo.
Quiero ofrecerles una visión de cómo sería eso.
Esta es la primera vez que compartimos esto públicamente.
Uds.
son la primera audiencia en escucharlo.
Vamos a lanzar un cohete.
En ese cohete habrá un satélite.
Y ese satélite recolectará información sobre la contaminación que está sobrecalentando el planeta.
Así, pondremos esa información en manos de gente que pueda establecer pequeñas medidas que cambien el curso del calentamiento global en nuestra vida.
Eso es mucho por asimilar, quizá deba recapitular.
Primero, me presentaré, me llamo Fred.
He sido ambientalista desde niño, cuando veía morir a los peces y ranas de la laguna de mi vecendario por un derrame químico.
Eso me anojaba.
Luego, un profesor me inspiró a pensar en el ambientalismo de forma diferente.
Cómo las mejores soluciones provienen de responder a los objetivos de prosperidad de la gente, cosas como la seguridad, la salud y el desarrollo en el mundo.
Así que me uní al Environmental Defense Fund en pro de esas soluciones.
Allí he trabajado toda mi carrera para un momento como este, «el» momento donde podemos dejar de luchar con el viento en contra para empezar a luchar con él a nuestro favor.
Debido al poder de la información, la información de la tecnología está disminuyendo en precio y aumentando en precisión.
Verán, hay algo del cambio climático de lo que no nos percatamos hasta hace solo una década.
El mundo ha estado tan concentrado en el dióxido de carbono que ha ignorado otro gas importante.
No reparamos en el metano, cuya contaminación causa un cuarto del calentamiento global que experimentamos ahora mismo.
Kilo por kilo, su impacto inmediato es mayor que el del dióxido de carbono.
Ochenta y cuatro veces más durante un periodo de 20 años.
Una de las mayores fuentes de contaminación por metano es la industria del petróleo y el gas.
Pero ello no es tan evidente, porque el metano es invisible.
Miremos este centro de almacenamiento de gas natural en las afueras de Los Ángeles.
¿Pueden ver el metano? Tampoco yo.
¿Qué tal ahora? Grabamos esto usando una cámara infrarroja, en ese lugar, exponiendo una de las peores fugas de metano en la historia de EE.UU.
Este es un cuadro muy diferente.
Resulta que el gas natural está remplazando la dependencia al carbón, el cual emite mucho más dióxido de carbono.
Pero el gas natural es en su mayoría metano.
Así que, a medida que se produce, procesa y transporta a los hogares y negocios de EE.UU., resultan fugas de tanques, tuberías y otros equipos.
Este se eleva al cielo y contribuye a los desastres que ahora experimentamos.
Eso «no tiene» que suceder.
Pero nadie le ha prestado mucha atención hasta que lanzamos un estudio nacional para entender el problema.
Usamos drones, aviones, helicópteros, incluso autos de Google Street View.
Resulta que hay mucha más contaminación por metano de la que el gobierno está reportando.
También descubrimos que, cuando hallamos de dónde surge el gas y se filtra, la mayoría de esas fuentes pueden arreglarse fácil y económicamente, conservando el gas que, de otra forma, hubiera sido desperdiciado.
Finalmente, aprendimos que cuando pones información como esa en manos de la gente, ella actúa.
Grandes compañías han reemplazado sus válvulas y han ajustado sus tuberías.
Colorado fue el primer estado de mi nación en delimitar la contaminación por metano; California hizo lo mismo, y el publicó se sumó.
Los tuits de #cutmethane se hicieron tendencia.
Y todos están prestando más atención ahora.
Estamos haciendo esto porque no podemos esperar a Washington, menos ahora.
De hecho, tenemos que tomar lo que hemos hecho hasta ahora e ir más alto, al cielo.
EE.UU.
representa cerca del 10 % de esta contaminación.
Para descubrir el resto, tenemos que hacerlo global.
¿Recuerdan el cohete? Este lanzará un satélite compacto, llamado MethaneSAT, para hacer lo que ninguno ha sido capaz de hacer hasta ahora: medir la contaminación mundial por metano en todos los centros petrolíferos, con precisión exacta.
Su flujo de datos nos permitirá mapear esa contaminación para que todos puedan verla.
Así que todo es sobre transformar datos en acción, tal y como lo hicimos en Estados Unidos.
Hemos visto que cuando le presentamos esos datos a las empresas, muchas de ellas reducen sus emisiones.
Los ciudadanos tendrán el poder para tomar acciones; los gobiernos regularán sus normas.
Esto, porque todos nuestros datos serán gratuitos y públicos.
Habrá transparencia.
Todos podremos ver cuánto progreso se está realizando y dónde; lo cual me conduce a nuestro objetivo: reducir la contaminación por metano a un 45 % para el 2025.
(Aplausos) Eso tendrá el mismo impacto a corto plazo que el cierre de 1300 plantas eléctricas de carbón.
Eso es un tercio de todas las plantas eléctricas de carbón en el mundo.
Nada más puede tener esta clase de impacto a corto plazo a tan bajo costo.
El hecho de que un solo satélite pueda ayudarnos a frenar el calentamiento global es muy destacable.
Esta es nuestra oportunidad para crear un cambio en nuestras vidas, y podemos hacerlo ahora.
Gracias a la generosa donación de Audacious Project, estamos a punto del despegue.
Pero mi tiempo ya se agota, y les prometí una visión de cómo luciría una pieza clave de la solución.
¿Pueden verla? ¿Pueden ver cómo este satélite aprovecha lo mejor de la ciencia, la información y la tecnología? ¿Pueden ver que estamos ingresando a una nueva era de innovación que está impulsando el progreso? ¿Pueden ver que está en nuestras manos? Nos hemos puesto un ambicioso objetivo de tres años para el despegue, y cuando el satélite esté listo, tendremos una fiesta de lanzamiento, un lanzamiento literal.
Así que imaginen un día con un cielo azul, cientos de personas, cámaras de televisión, niños con sus miradas hacia el cielo enfocadas en algo que cambiará su futuro.
¡Qué extraordinario día será ese! ¡Qué gran oportunidad tenemos! No veo la hora.
Gracias.
(Aplausos)
https://www.ted.com/talks/fred_krupp_let_s_launch_a_satellite_to_track_a_threatening_greenhouse_gas/