Con aproximadamente 5 años de edad los niños empiezan a aprender a leer. No hace falta recordar la importancia que tiene la lectura en este curso.
Por eso es esencial que «todos los días» practiquéis con vuestros hijos/as por lo menos cinco minutos. Para vosotros solo son un rato y para ellos significa sentirse seguros en lo aprendido y avanzar positivamente.
Como todos sabemos para los niños y niñas el aprender a leer supone un reto importantísimo, y es un punto de inflexión donde, dependiendo de como lo hagamos los padres y los educadores, podemos formar a grandes lectores o a niños que jamás toquen un libro.
Con 5 años practicamente no hay niños que no quieren leer. A esta edad de 5 o 6 años no suele ser necesario motivar a un niño a aprender a leer ya que simplemente con un poco de refuerzo positivo suele ser suficiente (su curiosidad de niño y sus ganas de aprender le suelen llevar a automotivarse).
El reto viene sobre los 6 años (aunque los consejos que expongo a continuación son validos para cualquier edad).
La adaptación al proceso de la lectura necesita un gran esfuerzo y si no somos capaces de motivar a los niños correctamente para leer, difícilmente conseguiremos que les resulte una actividad placentera.
A lo largo de su trayectoria escolar se les va a ir exigiendo cada vez más comprensión lectora y más velocidad lectora, por lo que si conseguimos que para ellos la lectura sea un placer y no una obligación habremos dado uno de los saltos académicos más importantes que va a tener en su vida.
Consejos para motivar a los niños a leer:
- Léele cuentos en voz alta. Es importante dejarle elegir los cuentos que quiere que le leas. Esto se le puede hacer desde que tiene 1 año de edad.
- Nunca intentes imponerle una lectura. Deben elegir lo que ellos quieran y si no les gusta darles reafirmarles en que a ti tampoco demasiado. Esto irá generando en ellos una confianza y potenciando su autoestima. Asimismo se empezarán a dar cuenta de que no todo merece la pena ser leido, pero hasta que no lo lees no lo sabes.
- Realiza actividades culturales con el y llévalo a la biblioteca. La cara de un niño la primera vez que entra en una biblioteca llena de libros y cuentos suele ser digna de admiración. Animale a hacerse el carnet de la biblioteca y sacar libros periódicamente.
- Cuando sea más mayor foméntale la curiosidad por las palabras. Cuando alguna palabra no entienda búscala con el en el diccionario y explícasela. Ayúdale a buscar en diccionarios, enciclopedias e internet.
- Aunque ya sepa leer solo, nunca dejes de leer con el en voz alta. Hay muchas lecturas preciosas que leídas en voz alta con tu hijo o hija (por muy mayores que sean) provocarán en los ambos experiencias, sensaciones y momentos inolvidables.
- Ten libros en casa a su alcance. Ponle libros y cuentos en su habitación donde los pueda coger sin problemas.
- Lee tu. Es obvio, pero no deja de ser uno de los puntos más importantes y necesario recordar. Los niños hacen lo que ven en casa. Si sus padres leen ellos tienen muchas mas opciones de acabar siendo grandes lectores. Los niños imitan todo, lo bueno y lo malo.
Háblale de lo que tu lees, lo que te gusta, las temáticas que te interesan,… - Cualquier momento es bueno para leer. Comienzan leyendo carteles por la calle, postes de información, etc, y cuando ya van teniendo un poco más de fluidez deja que te ayuden leyendo las recetas y cocinando contigo, planificando viajes y leyendo cosas de la guía, haciendo la lista de la compra contigo y ayudándote a comprar,…
- Enséñale lecturas divertidas como comics, libros de chistes o adivinanzas, animales, curiosidades,… Cualquier lectura que le despierte la curiosidad es buena.
- Recomiéndale libros (aunque como hemos dicho antes no le obligues a leer nada que no quiera) y animales a crear su propia biblioteca.
- Un buen libro adecuado para su edad es el mejor regalo. Recomienda a tus amigos, familiares, papa noel,… que le regalen libros.
- Limita el tiempo de televisión, ordenador, tablets y videojuegos. Si bien algunos programas de television de calidad, así como juegos y aplicaciones educativas, pueden ayudar al desarrollo y la educación integral del niño (algún día escribiremos un articulo sobre esto), la mayor parte del tiempo que pasan delante de estos dispositivos es tiempo perdido y el enemigo número 1 de la lectura.
El mundo audiovisual no requiere ningún esfuerzo por su parte, por lo que si no somos capaces de motivar a los niños a leer, se dedicarán a perder (en el mejor de los casos) su tiempo de ocio delante de ellos.
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