La Biblia nos dice que Satanás va por el mundo como un «león rugiente» en busca de aquellos a quienes pueda devorar. Por esa razón Dios manda a Los Angeles para defendernos.
Cuando estaba a punto de destruir Sodoma y Gomorra, Dios os envío para que advirtieran a lote a su familia y se salvarán.
Una de las verdades que más me consuela cuando viajo de un lado al otro del mundo por mi trabajo, es saber que Dios ha emplazado a lo largo de mi camino a sus guardias celestiales para protegerme y guiarme a través de los peligrosos caminos del mundo. No los veo con mis ojos, pero lo siento alrededor.
La Biblia también nos dice que cuando morimos nuestro espíritu se aleja del cuerpo a través de la atmósfera. Pero el diablo está precisamente ahí, acechando.
Si nuestros ojos fuesen capaces de descubrirlos, veríamos el aire repleto de demonios y a los enemigos de Cristo.
Por lo tanto, los ángeles tienen también la función de conducir nuestra alma la presencia de Dios.
Algunos no creyentes argumentan que el diablo no existe, y puede ser cierto.
Aún asumiendo que el diablo fisico no exista, el mal si existe, y es inherente a la especie humana, por lo que el diablo viviría en el mal, en cada parsona mala, el el alma de la mala gente.
Muy interesante. No me soluciona del todo mis dudas, pero me gusta esta página