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Las Aventuras del barón de Munchausen

El barón de Munchausen era un barón muy mentiroso. El barón de Munchausen ha sido, sin duda, uno de los más grandes mentirosos de todos los tiempos.

Los fantásticos lances del barón de Munchausen constituyen, sin duda, uno de los libros más divertidos y amenos que jamás se hayan escrito.

He aquí algunas de sus asombrosas exageraciones, que pueden leerse en su famosísimo libro de las Aventuras del barón de Munchausen:

Un día estuve en gran peligro de perecer en el Mediterráneo. Bañábame una hermosa tarde de verano cerca de Marsella cuando vi un gran pez que, con la boca abierta, se acercaba rápidamente hacia donde yo estaba. Imposible era salvarme, pues no tenía medios, ni siquiera tiempo. Sin pensarlo un instante, me reduje a mi mínima expresión, esto es, me hice un ovillo, doblando todos mis miembros contra mi cuerpo, doblado también; y de ese modo me deslicé entre las mandíbulas del monstruo hasta su mismo tragadero…

 

Las Aventuras del barón de Munchhausen 3

Las Aventuras del barón de Munchausen

Otra más:

Confiando tal vez excesivamente en mi valor y llevado por mi celo, me coloqué al lado de un enorme cañón, y en el momento de salir el tiro, me lancé sobre la bala con el fin de penetrar en la plaza, sentado a horcajadas sobre ella.
Pero cuando estuve a mitad de camino, se me ocurrió pensar lo siguiente:
-Entrar… Bien. Pero ¿y salir? ¿Qué va a suceder una vez dentro de la plaza? …
Se me tendrá por espía y se me ahorcará en el árbol más próximo…
Esto no es un fin digno de Munchausen.
Habiendo hecho esta reflexión, seguida de muchas otras del mismo género, vi otra bala dirigida desde la fortaleza contra nuestro campo, la cual bala pasaba a poca distancia de mí. Salté, pues, sobre ella y volví donde estaban los míos …

Las Aventuras del barón de Munchhausen 1

Las Aventuras del barón de Munchausen

Otra más:

Mi caballo púsose a beber de un modo inconcebible, sin que por lo visto saciara su sed.
Pronto tuve la explicación de este fenómeno, porque al volverme para ver si venían los míos, vi asombrado que a mi caballo le faltaba todo el cuarto trasero, cortado limpiamente de un tajo.
El agua, pues, se escapaba por detrás a medida que entraba por delante, sin que el pobre animal conservara una gota …

Las Aventuras del barón de Munchhausen 2

Las Aventuras del barón de Munchausen

 

Todavía otra más:

… y en seguida me vi asaltado por un oso descomunal. «Sin duda viene a darme la bienvenida», pensé.
Y tomándole las manos entre las mías, se las estreché con tal y tanta cordialidad que el animal se puso a aullar desesperadamente; pero yo, sin compadecerme de sus lamentaciones, lo mantuve en esta posición hasta que se murió de hambre…

 

 

Y para terminar:

Una mañana vi desde la ventana de mi dormitorio un gran estanque que se hallaba en la vecindad, cubierto todo él de patos silvestres.
Descolgué inmediatamente mi escopeta y bajé la escalera con tal precipitación, que choqué de cara contra la puerta.
El golpe me hizo ver todas las chispas de una fragua; pero no por eso perdí un momento.
Iba a disparar, cuando advertí con desesperación que al violento choque de la puerta se me había caído la piedra de la escopeta.
¿Qué hacer en tan crítico momento?
No había que perder tiempo. Por fortuna, me acordé de lo que había visto hacía poco: alzo la cazoleta, dirijo el arma en dirección a la caza y me doy un pinchazo en un ojo.
Este vigoroso golpe hizo saltar un número de chispas suficiente para encender la pólvora: el tiro partió y maté cinco pares de patos, cuatro cercetas y dos gallinetas de agua.

 

El barón de Munch­ausen existió realmente: se llamó nada menos que Karl Friedrich Hieronymus, nació cerca de Hannover (Alemania), en 1720 y falleció en 1797.
Luchó en el bando ruso en la guerra contra los turcos y se hizo famoso por sus extraordinarias aventuras y su forma de narrarlas, con exageración, en el circulo de amigos.

Basándose en las aventuras de este pintoresco personaje, el escritor alemán Rudolf Erich Raspe publicó en 1785, en inglés, aventuras del barón de Munchausen, que alcanzó gran éxito.

 

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